Después de dos semanas de espera, el ministro de Finanzas Luis Caputo se presentó ante la Comisión Bicameral de Seguimiento y Control de la Deuda Externa, donde lo esperaban no solo sus 20 integrantes, sino también unas cuantas decenas de diputados y senadores de distintos bloques que no se querían perder la cita.
Con saco pero sin corbata, Caputo llegó pasadas las 9 acompañado por su secretario de Finanzas, Santiago Bausili y su jefe de Gabinete, Pablo Quirno, que lo asistieron a lo largo de su exposición, sobre todo en las cuestiones técnicas. En la mano tenía una tablet, donde contaba con toda la información dura sobre la emisión de deuda y las negociaciones que llevó a cabo durante su gestión.
Además del “Papelito Gate”, la jornada estuvo llena de detalles de color, cruces y también oscuridad, porque justo en el momento de los cuestionamientos de la izquierda, de la mano de Nicolás del Caño se cortó la luz.
“EN EL SENADO NO SE APLAUDE”
El Salón de las Provincias, que desde el comienzo de la exposición de Caputo estaba colmado de legisladores, asesores y mucha prensa, pareció en muchos momentos una tribuna de fútbol, porque ante cada intervención, los colegas de bloque celebraban los conceptos más salientes. Pero en varias oportunidades el presidente de la Comisión José Mayans debió aquietar los ánimos y pedir que se baje el tono. “En el Senado no se aplaude”, dijo entre risas y reprochó: “Es difícil trabajar con diputados, son bulliciosos”.
“QUE HABLEN DE LAS SEYCHELLES”
Ante los reiterados cuestionamientos a Caputo por el ocultamiento de su participación en sociedades offshore, los legisladores del oficialismo recordaron un episodio durante la gestión de Cristina Kirchner que utilizaron en su defensa. Allí mencionaron a viva voz del affaire de la ex mandataria por su misterioso paso por las Islas Seychelles, un paraíso fiscal donde se sospechaba resguardaba el dinero de Santa Cruz.
“YO LE CREO AL MINISTRO”
En esta oportunidad, la Coalición Cívica, una de las fuerzas fundadoras de Cambiemos, contó con poca representación. Solo Héctor “Toty” Flores, dirigente social de La Matanza, estuvo como referente del partido de Elisa Carrió y aprovechó para hacer una defensa del ministro. Con su tono de voz tranquilo, Toty dijo: “Yo le creo al ministro, debe ser difícil para su familia que se lo esté permanentemente cuestionando”. Aunque retrucó que será el “primero en denunciar” si “un funcionario revolea bolsos en un convento” y aclaró sobre el final que no es “obsecuente”.
MIRANDO AL PAIS DEL NORTE
El jefe del bloque de Diputados del FPV-PJ Agustín Rossi inició su intervención como invitado con una cita aunque no dijo a quién pertenecía. “Hay escapes a los que solo los ricos y las grandes empresas acceden, tienen acceso a cuentas offshore y trampean el sistema. Las familias de clase media no están en la misma posición para hacer esto”. Dijo que no era ni de Néstor Kirchner, de Mauricio Macri, de Evo Morales ni de Lula da Silva. “Es una frase de Obama, usted acaba de justificar una offshore y Obama descalifica las cuevas fiscales”, le marcó Rossi al ministro macrista y luego se quejó de que “nos gobiernan los ricos”.
”LASTIMA QUE NO ESTA CARRIO”
En medio de la oscuridad y sin micrófono, Nicolás del Caño recordó sus viejas épocas de dirigente universitario y se puso a hablar a viva voz. Para hacer entender al oficialismo que cualquier cuenta offshore es igualmente cuestionable, preguntó qué les parecía que los hijos de Lázaro Báez tengan cuentas en el exterior sin declarar. “Lástima que no está Carrió, tal vez canjeó algún pasaje para llegar”, chicaneó el mendocino a su colega de Diputados, involucrada en la polémica por el canje de pasajes por dinero, citándola como denunciante en el caso del enriquecimiento de Lázaro Báez.