El empresario kirchnerista Lázaro Báez, su hijo Martín y el contador Daniel Pérez Gadin presentaron este miércoles escritos ante el juez Sebastián Casanello.
Además, se negaron a ser indagados en la causa por presunto lavado de dinero a través de la financiera apodada "La Rosadita" en la que están siendo investigados, según informaron fuentes judiciales.
El titular de Austral Construcciones y su contador fueron detenidos ayer por orden del magistrado.
Al edificio de los tribunales federales llegó esta mañana también el financista Federico Elaskar para ser indagado por el juez Casanello.
Casanello dispuso la captura del empresario en una causa que lleva dos años de tramitación pero que se reactivó fuertemente en las últimas semanas, cuando se difundió por Canal 13 una filmación donde allegados al empresario, entre ellos su hijo Martín, aparecen contando millones de dólares en la financiera SGI, en el barrio porteño de Puerto Madero.
El juez tomó la drástica medida ante el dato de que Báez estaba preparando su avión en Santa Cruz, lo que le generó la sospecha de que podía irse con rumbo desconocido.