Es recordada la polémica que se generó en el año 2008 tras la visita del evangelista Luis Palau a la Argentina. Se realizó entonces un multitudinario festival religioso sobre la avenida 9 de Julio y las acusaciones se cruzaron entre macrismo y kirchnerismo por las complicaciones generadas. Hasta hubo denuncias por presuntos pagos ilegales, luego de lo cual el propio pastor evangélico debió aclarar: "Nadie pidió nada y nadie cobró". Así las cosas, Palau regresó al país y se volvió a entrevistar con Mauricio Macri quien se considera su "amigo".
En la mañana de ayer, Macri recibió en la residencia de Olivos a quien calificó como "uno de los grandes predicadores del mundo".
Durante la charla, que se extendió por espacio de 30 minutos, el líder religioso también ponderó la decisión del Jefe del Estado de "dar prioridad a la unión de los argentinos después de tantos años de división" y se puso a su disposición y le manifestó: "Siempre rezamos por usted", según se informó oficialmente a través de un comunicado de prensa.
Macri, por su parte, agradeció las palabras del alto referente de las iglesias evangélicas, destacó la importancia de promover "los valores del esfuerzo y la cultura del trabajo" y expresó su reconocimiento por la tarea que desarrolla su comunidad en materia social y para contribuir al tratamiento y la prevención de las adicciones.
El Presidente se reunió en varias oportunidades con Palau cuando era jefe de Gobierno porteño; en 2014 lo declaró “huésped de honor” de la Ciudad de Buenos Aires y lo calificó como “un amigo que va a dar el mensaje positivo de siempre”.
Palau, cuyo mensaje es seguido por millones de personas en 112 países a través de la radio y la televisión, nació el 26 de noviembre de 1934 en Ingeniero Maschwitz, partido bonaerense de Escobar, comenzó a predicar a los 18 años y es autor de más de 50 libros en español e inglés.