Concluyó su intensa historia de amor con "Nina", su compañera de la vida y la militancia, pero emprende una empresa aún mayor: reencontrarse con su padre, que lo abandonó cuando era muy pequeño. Así es hoy la vida del piquetero Raúl Castells, quien admitió que se separó de su esposa Saturnina Peloso y que se radicó en Rosario, su ciudad natal, donde comenzó a buscar datos de su Rogelio Castells, su papá, y de otros familiares en la zona.
"Mi infancia fue muy dura, mi padre abandonó a nuestra familia cuando era muy pequeño y nunca más tuve noticias de él", dijo anoche Castells, líder del Movimiento Independiente de Jubilados y Desocupados (MIJD), a un programa de la televisión por cable de Rosario.
Muy emocionado, el dirigente recordó el tesón de su madre, que "tuvo que sostenernos a todos y nos trasladó al norte de la provincia, desde donde nunca más volvió para evitar los malos recuerdos". Rastreando casa pista como si fuera la última, Castells dijo que no tenía recuerdos de su padre y que por eso decidió "intensificar su búsqueda, como así también la de otros familiares de la línea paterna que pudieran vivir en la zona".
"Necesito conocer mis orígenes y cubrir un espacio vacío que llevo en mi interior", recordó el dirigente de desocupados. Asimismo, reconoció su separación de Peloso, quien fue su compañera durante 15 años y se quedó en la vivienda familiar del Gran Buenos Aires.
Por último, apelando a la solidaridad, pidió a quienes puedan aportar datos sobre sus familiares que le acerquen pistas a su casa e Colombres al 1600, para poder reencontrarse con su padre y su identidad perdida.
Fuente: DyN