Cuatro días de agitada movida cultural, y sobre todo comercial, en La Rural. La nueva edición de ArteBA se da en el marco de una situación económica no del todo alentadora a nivel nacional, pero como repiten muchos especialistas e integrantes del colectivo de galerías, el arte es una inversión a largo plazo y, en general, segura para quien dispone de billetes que no necesitan replicarse en un segundo semestre.
Por eso, mucho entusiasmo recorrió los diferentes stands del Pabellón Azul del predio palermitano. Algunos vendedores comentaban algunas ventas y las cifras argumentando con total convencimiento que mencionarlas alienta a que compradores menos decididos se aventuren a confiar en el arte como inversión.
Se largó. La apertura oficial de esta feria 2018 se dividió en dos partes. Una menos mediática, que se realizó al mediodía y con el auspicio de uno de los bancos main sponsors, extranjero por cierto. A esa asistió Juliana Awada, una visitante de asistencia perfecta a este evento. Con el director de ArteBA, Alec Oxenford, recorrió los principales stands.
Por la tarde de ese mismo miércoles tuvo lugar la segunda apertura, para autoridades, invitados especiales y la prensa. Allí ya se sumaron empresarios, modelos, conductores, y sobre todo artistas cuyas obras se exhibían para la venta en los diferentes espacios y “cabinets” del Pabellón Azul.