La nueva avenida Corrientes crece con la construcción de siete salas de teatro

Con cuatro salas en plena construcción, otras tres que ya fueron inauguradas en septiembre del año pasado, obras de infraestructura y peatonalización de un tramo, y una variada gama de actividades culturales, la avenida Corrientes busca posicionarse otra vez como la “Broadway Argentina”. Es decir, volver a ser uno de los principales ejes culturales de la Ciudad.

Más allá de los trabajos de infraestructura que encaró el gobierno porteño en los últimos años, que culminaron en la peatonalización de dos carriles de la avenida entre Callao y Libertad a partir de las 19 y hasta las 2 de la madrugada, los productores teatrales no se quedaron quietos y encararon la construcción y remodelación de diferentes salas teatrales.

El primer paso lo dio Carlos Rottemberg con la apertura de tres salas, el Multitabaris Comafi, en Corrientes al 800. A pocos metros de allí, en la esquina de Esmeralda, el Grupo Arupac erigió una torre de 35 pisos en el mismo lugar que antes ocupaba el Teatro Odeón, que fue demolido en 1995. El edificio, que llevará el mismo nombre, tendrá dos salas para 450 personas.

En la esquina de Paraná y Corrientes, Juan José Campanella está construyendo otra sala teatral para unos 700 espectadores: el Politeama, un legendario teatro de Buenos Aires demolido en la década de los 50.

La circunstancia toma otra dimensión si se tiene en cuenta el contexto de crisis que rodea a la industria teatral en la que, salvo excepciones como Toc Toc, por ejemplo, la mitad de las salas se encuentran vacías.

Liliana Munini, de la Asociación de Amigos de la Calle Corrientes, afirmó que se van a realizar eventos culturales una vez por mes. “Son eventos que apuntan a traccionar más gente a la avenida, más allá de los teatros”, señaló a PERFIL. En este sentido, Munini contó que “desde el lunes pasado los locales gastronómicos de Corrientes que están sobre la zona peatonal, entre los cuales figuran las pizzerías más tradicionales, ofrecen un 10% de descuento a quienes concurran”, agregó.

Otra de las actividades previstas para la avenida Corrientes es la realizaación de la Noche de la Música, el próximo sábado 22.

A su vez, el teatro que también se encuentra en obra es el Presidente Alvear, que forma parte del Complejo de Buenos Aires. Si bien el lugar está cerrado desde hace cinco años, el Gobierno de la Ciudad completó la primera etapa de su remodelación y puesta en valor del lugar.

Tanto en el caso del Odeón como en el futuro teatro de Campanella, sus aperturas están previstas para 2020, de acuerdo con lo adelantado por sus dueños.

 En el caso del Alvear, habrá que esperar un poco más, ya que aún falta completar la segunda etapa de obras, que si bien ya está definida, aún no fue licitada, según explicaron desde el Ministerio de Cultura porteño.

“Hacer un teatro es un proyecto a largo plazo y uno no puede fijarse en la foto, hay que ver toda la película. Hay que tener confianza en lo que uno hace”, señaló Campanella, en diálogo con PERFIL.

Por su parte, Sebastián Blutrach, titular de la Asociación Argentina de Empresarios Teatrales (Aadet), aseguró a este diario que “siempre es una buena noticia la apertura de un teatro, tanto para el sector como para la cultura en general. A pesar de que en este momento la actividad se encuentra expectante por la crisis económica, abrir teatros son inversiones a mediano y largo plazo, y qué mejor que tener los espacios disponibles para las épocas fuertes. Siempre festejamos las aperturas de nuevas salas”.

Por último, el referente de la actividad teatral porteña, Carlos Rottemberg, afirmó que la única deuda que queda es la posibilidad de extender un poco más el horario del subte. “Es la asignatura pendiente. Para mucha gente la mejor salida siempre fue ir al centro pero hay que garantizar el regreso. El subte fue siempre la mejor salida para el regreso. Es lo único que falta para continuar hablando de una ciudad caminable”, enfatizó.