"Arrancaron y se lo llevaron. Lo tiraron con todo, como si fuese una bolsa", contó Luciana, madre de Mateo, el bebé de cuatro meses que esta mañana permanecía internado en observación en una sala de terapia intensiva pediátrica del Sanatorio de la Trinidad Mitre, en Ramos Mejía, luego de que unos ladrones lo arrojaran contra la vereda tras un violento asalto.
El hecho, que ocurrió anoche alrededor de las 22.30 cuando la mujer ingresaba su auto Renault Sandero en el garaje de su casa, terminó con la fuga de los dos ladrones que, al ver que en asiento de atrás del vehículo estaba Mateo, lo tiraron por la ventanilla.
"Para mí eran muy jovencitos los dos, de 17 y 18 años", dijo la mujer sobre los ladrones. "No llegó la ambulancia y la Policía lo único que hizo fue difundir la imagen de Mateo", se quejó Luciana.
La salud de Mateo. Hoy le realizaron una tomografía computada. Se encuentra en observación y fuera de peligro ya que, como aseguró la madre, "no hay lesiones internas" por lo que esta mañana volvió a amamantarlo.