Toda relación amorosa atraviesa una etapa inicial de enamoramiento donde predominan la ilusión, la expectativa y la confianza. Con el paso del tiempo ese romance se consolida o deriva en desencanto y ruptura.
El mercado financiero internacional y el gobierno de Macri estarían atravesando justo ese punto de inflexión, según la visión de algunos referentes de bancos de inversión, quienes aseguran que el idilio “se cortó” tras algunas decisiones como el cambio en las metas de inflación, el gravamen a la renta financiera y la falta de resultados del gradualismo fiscal. Las “mayores dudas” de los inversores se reflejaron también en la reciente suba del riesgo país de Argentina, que tuvo una pausa el viernes. Desde la revista Forbes al Financial Times, todos reflejaron el cambio de humor, que se ve en fuertes pérdidas en los bonos en dólares.
Para Mariano Arrieta, jefe de estrategia de inversiones del banco Credit Suisse, “el romance se cortó un poco antes (de la corrida cambiaria) pero le faltaba convicción al mercado para vender; en los últimos días la encontró, y se buscó salir de Argentina casi a cualquier costo”. Dijo que “hace rato hay dudas de los inversores; había expectativas altas con este gobierno, por eso hubo buena performance de bonos y acciones, pero ahora el mercado se está ajustando a una realidad que no es la esperada”. Opinó que “la primera desilusión fue con el cambio de metas inflacionarias en diciembre, aunque estaba paciente; pero en las últimas semanas se vio que el contexto inflacionario es más complicado del previsto”. Aseguró que “en un escenario de mayor incertidumbre, se empieza a especular o temer qué va a pasar con las elecciones en 2019; hasta hace no mucho el mercado entendía que había posibilidades concretas de tener este gobierno uno o dos mandatos más, hoy esa expectativa está en revisión”.
Para Juan Salerno, gerente de inversiones de Compass Group, el enamoramiento “se cortó en enero” por la decisión de “gravar la renta financiera” y “ahí se empezó a ver el desarme de posiciones de bonos argentinos”. Además, “el camino gradual de baja del déficit fiscal obviamente no convencía al mercado y por eso ahora Dujovne tuvo que ser más agresivo con la meta”. Atribuyó la suba del riesgo a los factores anteriores. Indicó que “cuando salimos en 2016 del default técnico de Argentina estaba en 540 puntos, luego cayó, y ahora está otra vez en 450 puntos”, aunque prevé que las medidas anunciadas repercutan en una baja”.
Alberto Ramos, economista de Goldman Sachs, coincidió en que hay mayores dudas “porque hay mucha gente que ha perdido mucha plata; el mercado tenía bastante invertido en títulos de corto plazo en la Argentina, y el dislocamiento del cambio tomó toda la ganancia”, y a eso se suma “que la economía argentina sigue teniendo una vulnerabilidad muy grande que el Gobierno heredó, pero quizás se demoró un poco en arreglarla, y en la parte fiscal habría que ir un poco más rápido”. En igual sintonía, Alberto Bernal, jefe de estrategias de XP Securities, evaluó que “no es que el mercado no aprecie lo que está haciendo Macri, sino que la situación inicial de Argentina ya era complicada por lo que dejó el gobierno anterior”.