Techo de cristal no es un término nuevo, pero vale la pena traerlo a colación el 8 M, cuando se celebra un nuevo Día Internacional de la Mujer.
Durante mucho tiempo, las mujeres se han enfrenado con un techo que limita sus carreras profesionales, y que les impide crecer profesionalmente. Es lo que se conoce como "techo de cristal", y si bien año a año se ven mejoras, las limitaciones persisten en diferentes industrias.
Por caso, en 2021, un estudio del CIPPEC aseguró que el presente laboral de las mujeres en la ciencia y tecnología dentro de Argentina, Brasil y México manifiesta aún grandes limitaciones. Aunque 40% de los graduados en carreras relacionadas a la ciencia y tecnología son mujeres, sólo un 24% de los empleados en estas industrias pertenecen al género femenino. Algo así como que cada 8 hombres en esas industrias, sólo hay 2 mujeres y un cuarto. Lejos aún de lo que podría llamarse "paridad".
Brecha de género: cómo impacta en los salarios, el desarrollo de carrera y las jubilaciones
Además, una investigación realizada por la agencia regional de comunicación estratégica, another, mostró que la diferencia salarial de género aún está presente con México, Argentina, Colombia y Chile como sus mayores exponentes en la región.
La buena noticia es que, según ese estudio, los cambios para llegar a la equidad han comenzado a implementarse a nivel corporativo. "Los encuestados afirmaron que 53% de sus lugares de trabajo implementaron cambios para incentivar la igualdad de género, y en el 70% existe una equidad para liderar cargos directivos, ya sea por hombres o mujeres, intentando derribar lentamente este techo de cristal", explican desde another.
En Perfil, recolectamos el testimonio de mujeres empresarias, emprendedoras, gerentes y asalariadas que eligen diariamente el desafío de crecer en el ambiente corporativo. Son grandes tomadoras de riesgo, porque saben que deberán compatibilizar la maternidad con las horas laborales, pero no hay limitante para quien quiere sumar, cada día, un nuevo logro.
7 miradas empresarias sobre la mujer en los cargos directivos
Gabriela Bardin, Gerente General de P&G analiza su presente en la empresa de retail y explica cómo puede la mujer compativilizar la vida personal con la laboral. “Cuando asumí como directora de ventas, casi no había mujeres, ni del lado de la industria ni del retail. Las negociaciones eran más duras, se abrió un escenario diferente y me di cuenta de que para mis pares fue raro que hubiera una mujer”, dijo y acepta que también tuvo momentos, en especial con los nacimientos de los hijos, donde se sintió tironeada por ambos roles (el de madre y el de profesional). "Lo fui resolviendo escuchando mis necesidades, y apoyándome en mis jefes que siempre me dieron el soporte y espacio que necesité”, aseguró y recordó que gracias a esas vivencias aprendió que "cuando una persona te dice: `Yo ahora no quiero un puesto de tanta responsabilidad´, no significa que no lo quiere nunca, quizás esté pasando por lo que llamamos `momentos de la vida´, en donde necesite balancear un poco más con otras responsabilidades, pero tal vez, más adelante sí quiere una posición más relevante. Y esto pasa más allá del género", destacó.
Según Bardín “Hoy podría decir que hay muchas más mujeres en la industria de consumo masivo. En mis interacciones a través de cámaras, asociaciones ya somos un número mucho más significativo. Y esto es un gran avance porque tenemos que ir hacia lo que realmente refleja la sociedad. Se ha avanzado mucho, pero también aún hay un camino por recorrer y las empresas tenemos una gran responsabilidad. Nuestro compromiso tiene que estar en abrir la conversación, pero también en generar acciones concretas que abran oportunidades tanto dentro de la empresa como fuera. Ese todavía es nuestro gran reto. Cómo seguimos influenciando y contagiando de manera positiva hacia afuera para que esto permita construir un mundo mucho más inclusivo y equitativo”.
Diversidad en las empresas... ¿se cierra la brecha?
Para María A. Alegre, Directora Mujeres Líderes de Negocios UCEMA, la brecha se está cerrando, "pero a un ritmo exasperantemente lento", dice. Y explica que, al tomar la participación de mujeres en Directorios (KPMG y la revista Mercado) se ve que, en 2019 y 2020 era del 10%, en 2021 ascendió al 13.7%. "A este ritmo, llevará décadas lograr Boards mejor balanceados. Hay que emprender acciones urgentes para acelerar el proceso", asegura.
Y recuerda que en la UCEMA, con Women Corporate Directors Foundation, KPMG y la Bolsa de Comercio lanzaron en 2020 la Certificación Next Board, "donde formamos profesionales C-Level para integrar Directorios más diversos e inclusivos. Y en 2021, nos subimos a un nuevo desafío con el Programa Level Up, junto a Mercer y el equipo de Mujeres al Mundo del HSBC, que busca formar mujeres con ambición de dar su siguiente paso profesional. Les damos herramientas concretas para potenciar sus carreras y entrenarse para que las cosas pasen", precisó.
La académica recordó que "se habla mucho más que antes de la diversidad como valor en las empresas. Pero hace falta más que hablar, hace falta hacer: buscar métricas, KPIs, fijar objetivos y medir el progreso, implementar políticas que muevan esos indicadores y construyan diversidad. De todo esto aún se ve poco. Se dice mucho, pero se ve poco", argumentó.
Inclusión
explica PERFIL que la mujer es protagonista de ciertos avances en el mundo de la inclusión, pero aún falta.
"Pienso que nuestro trabajo para hacer una cultura y un mundo aún más inclusivo nunca termina. Claramente, hay que reconocer el logro de muchas mujeres que han superado barreras y perseverado frente a desafíos importantes. Pero hay muchas otras que soportan de manera desproporcionada la carga de equilibrar el trabajo profesional y la vida personal/familiar", explica.
Y agrega: "Todavía necesitamos afrontar los desafíos propios de la mujer, basados únicamente en nuestro género ya que he notado que muchas limitaciones que aparecen están marcadas por nosotras mismas".
Kenny reconoció que en su compañía "hay espacio para el autodesarrollo, para ser escuchadas, teniendo la posibilidad de levantar la mano, de capacitarse para tener una marca personal y una amplia red de contactos y poder expresar en voz alta qué es lo que queremos y necesitamos".
Al mismo tiempo, consideró que "todos debemos ser aliados activos en estos temas y aportar nuestro grano de arena para poder hablar de oportunidades iguales para todos. Por eso, es importante que la compañía genere esos espacios para que esto se pueda concretar", dijo.
Techo de cristal
En relación a la brecha de género y el famoso techo de cristal, Mayra Fiszman, directora regional de Finanzas de avenida+, empresa de producción de marketplaces bancarios, opina que “en nuestro país, si bien las mujeres hemos avanzado mucho, aún queda un largo camino por recorrer. Los altos cargos, o directorios, siguen estando liderados por hombres en su mayoría, y con mejores remuneraciones. En muchas empresas, les sigue preocupando que una mujer vaya a tener hijos, como si eso las inhabilitara a ser buenas profesionales. Por suerte estos casos cada vez son menos”, destacó
¨Por su parte, Josefina Quevedo, Líder de Tribu Everyday Banking del Galicia aseguró que ve mayor consciencia de la diversidad en las empresas, y no sólo hablando de cuestiones de género. "Hay nuevos espacios, temas de discusión que pueden hablarse abiertamente y entendimiento de que los equipos diversos generan mejores resultados", dijo.
Además expresó que el desafío ahora es pasar a la acción "y seguir promoviendo espacios donde hombres y mujeres debatan ideas para promover la diversidad en todas las áreas. Tengo la suerte de trabajar en el equipo de Producto y Tecnología donde se promueve la diversidad, siendo la primer mujer líder de tribu de producto jamás sentí prejuicios de mis pares", comentó a Perfil.
Las mujeres empiezan a aparecer en el Mundo de la Tecnología
“El principal obstáculo de las mujeres, somos las mujeres mismas”, arranca sin anestesia Pamela Scheurer, que hace 17 años cofundó Nubimetrics, empresa de data analytics que brinda servicios a más de 15 países.
Ella, además es la líder técnica y CTO de esta organización global. “Es nuestro propio síndrome del impostor”, continúa, “son los mandatos impuestos generación tras generación que nos auto imponen un techo. Debemos seguir trabajando incansablemente para cambiar nuestra mentalidad y animarnos a abrazar el éxito, a reconocernos poderosas y ser capaces de generar cambios que impacten al mundo. Digo todo esto porque lo vivo en carne propia, me sigue costando aceptar los éxitos como propios y a veces se sigue filtrando hay una pizca de culpa cuando recibo un reconocimiento. Gran parte de este cambio creo que se va a dar más rápido si nos ayudamos entre todas”.
Si bien una gran parte de los países del mundo han llevado adelante políticas públicas para lograr que más mujeres se formen en disciplinas llamadas “STEAM” (llamadas así por ser las iniciales en inglés de Ciencia, Tecnología, Ingeniería, Artes y Matemáticas), los resultados aún dejan mucho que desear:
“Primero que nada, no existen profesiones para hombres o para mujeres, sino para las personas. Por eso, independientemente del género habría que intensificar desde la primaria materias tales como lógica, matemática, ciencias. La falta de talentos en la industria de tecnología se debe al miedo a este tipo de materias”, afirma Vanesa del Villar, CFO de Nubity, empresa especializada en optimizar servicios en la nube con presencia en Argentina (CABA y General Pico, La Pampa) y Ciudad de México.
Un estudio publicado recientemente en el diario El País de España sembró alarma, al concluir que cada año cae la proporción de mujeres que estudian Matemáticas, Informática y Tecnología en ese país. La conclusión principal de este relevamiento es que la etapa clave para frenar esta grieta es la educación primaria.
El campo también plantea su Desafío #MásMujeres
En el Día Internacional de las Mujeres, no podemos soslayar el gran nivel de hechos de violencia que invitan a que todos los ciudadanos actuemos para construir la sociedad que queremos y merecemos.
El campo también se suma al debate y desde la Red Mujeres Rurales y la Mesa de Género del Consejo Agroindustrial Argentino crearon el desafío #MásMujeres. "Una iniciativa que nos invita a preguntarnos qué sigue haciendo falta en el campo, la agroindustria y la sociedad. A través de este espacio buscamos amplificar la voz de mujeres y hombres en redes sociales y darnos el lugar que merecemos tener", explicaron y agregaron: "Este día y todos los días queremos y exigimos más mujeres visibles, libres y cuidadas. Más mujeres reales e incluidas, que caminen, trabajen y vivan sin miedo. La sociedad necesita más mujeres activas y protagonistas, que logren la unidad. Entre todas y todos podemos cambiar esta historia".