INTERNACIONAL
Segunda ola

Coronavirus en Brasil: las tragedias golpean las puertas pero hay una esperanza

Con números alarmantes de contagios y muertes, Brasil enfrenta su segunda ola. Con poco uso del barbijo, consideran que el presidente Jair Bolsonaro es el primer negacionista de esta pandemia.

El gobernador Joao Doria recibiendo las vacunas del coronavirus 20201218
Este viernes por la mañana llegaron al aeropuerto internacional de Guarulhos, en San Pablo, 2 millones de dosis de la vacuna china Coronavac. | Cedoc Perfil

Más de mil muertos por día, 80% de las camas ocupadas en hospitales públicos y el miedo a replicar en tierras tropicales el ejemplo funesto de la segunda ola del Covid-19 en Europa y Estados Unidos. Ese es el escenario que diseña la segunda ola del Coronavirus en Brasil.  Y, sin embargo, hasta ayer las playas paradisíacas, que son una de las fuentes de contagio, seguían abiertas y con aglomeraciones. Este último jueves resultó fatal: hubo 68.900 contagios y, por primera vez desde septiembre, los fallecimientos volvieron a los peores records del año

Pero el drama se vio hoy atenuado ante una expectativa: este viernes por la mañana llegaron al aeropuerto internacional de Guarulhos, en San Pablo, 2 millones de dosis de la vacuna china Coronavac. El gobernador Joao Doria, que estuvo presente para recibir el cargamento, declaró: “Es otro paso importante para garantizar que Brasil tenga condiciones de inmunizar cuanto antes a su población. Es un sentimiento de esperanza”.

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Para el infectólogo Guilherme Werneck, de la Universidad Estatal de Río de Janeiro (Uerj), el ambiente creado por   esta segunda etapa de la epidemia, configura “una tempestad perfecta” para la salud pública brasileña. “Faltan lechos hospitalarios porque fueron desactivados los hospitales de campaña. Y es difícil recuperarlos, especialmente por que se precisan médicos, enfermeros e insumos” indicó al diario carioca O Globo. Peor aún: en un punto tan álgido de la pandemia, apenas 33% de los brasileños cumple con las medidas de aislamiento social y uso del barbijo. Así lo reveló una encuesta de la consultora Datafolha.

El Observatorio Covid-19, que reúne investigadores, indicó que “hay una fuerte tendencia al crecimiento de casos, de las internaciones y de las muertes en todo el país; pero especialmente en los estados del sur”. Miembro del grupo, la especialista Maria Rita Donalísio, evaluó: “El aumento en el número de camas es importante, pero no alcanza. No influye en el número de contagios y decesos”. Y concluyó: “Debemos pensar en cerrar los locales donde la diseminación es mayor: fiestas, bares, espectáculos, playas aglomeradas y viajes”.

En esta segunda fase de la pandemia, dicen los epidemiólogos, “acorrala la tragedia”. Una conocida actriz carioca, Christina Rodrigues de sólo 47 años, murió el jueves por complicaciones del Coronavirus. La noticia tuvo un impacto aún mayor, cuando se supo no había conseguido su traslado a un centro de terapia intensiva. La actriz relató en un WhatsApp, poco antes de fallecer, que pasó 17 horas sentada en un banco de una Unidad de Pronta Atención (UPA). Y que una amiga debió llevarle un desayuno y sus remedios para la presión. “No consigo respirar sin oxígeno” gimió. De hecho, en Río de Janeiro la ocupación de camas del Sistema Unico de Salud trepó a 92%.  En medio de ese panorama desalentador, la ciudad fluminense de Buzios vive un momento de indefinición. La justicia obligó a las autoridades municipales a establecer un lockdown. Y eso significa que los turistas deberán abandonar los hoteles y salir del lugar este sábado a más tardar. Sobran los motivos para la decisión judicial: en una semana la cantidad de contagiados trepó más de 3.700 por ciento. Y esa famosa playa no cuenta con estructura sanitaria para atender a los infectados.

El gobernador Joao Doria recibiendo las vacunas del coronavirus 20201218

Algo semejante ocurre en Florianópolis. A pesar de eso, el gobernador del estado de Santa Catarina, Carlos Moisés, decidió liberar todas las actividades a partir del próximo lunes. Hoteles y posadas serán habilitados para funcionar a pleno. Otro tanto debe ocurrir con las playas, los parques acuáticos, los cines, museos y teatros. En esa capital, el Covid-19 alcanzó ayer un pico preocupante. El director de la Asociación de Hospitales de Santa Catarina alertó: “Con la llegada del verano, Navidad y Año Nuevo, Brasil va camino a repetir a mediados de enero el mismo fenómeno que ocurrió en Estados Unidos después de la celebración de la Acción de Gracias, el 26 de noviembre”. Un médico relató que la falta de lechos, para pacientes que contrajeron el Coronavirus, puede obligar al gobierno catarinense a trasladarlos a otros estados vecinos. “Hoy solo se consiguen camas apenas de dos formas: la dejó libre un enfermo curado o uno fallecido”.

A todo esto, el “negacionismo” de los brasileños sigue en alta. Una encuesta reciente reveló que 22% de la población no pretende vacunarse. Los especialistas solo tienen palabras críticas hacia el gobierno de Jair Bolsonaro. Acusan al presidente de ser “el primer negacionista”. Ayer, en su alocución habitual de los días jueves, Bolsonaro acusó a la Corte Suprema de imponer la obligatoriedad de la vacunación: “Cómo se puede tomar esa medida, si no alcanzan las vacunas para todos los brasileños”.

*Autora de Brasil 7 días. Desde San Pablo, Brasil.