La Casa Real Española no deja de protagonizar escándalos. Al accidente del Rey Juan Carlos en Botswana, y sus disculpas públicas por haber matado a un elefante durante una cacería en el país africano, se suman el repudio de las organizaciones ecológicas, en especial de una: WWF Adena España. Precisamente, el monarca es presidente honorario de esa agrupación, al menos, por ahora.
Según informa el periódico ABC.es, la organización ecologista WWF Adena España va a modificar sus estatutos sobre la presidencia honoraria del Rey. “La organización ha recibido más de 81.600 peticiones, a través de la plataforma de activismo online Actuable pidiendo la expulsión del Monarca por irse de cacería de elefantes a África”, explica.
Con esa modificación, tendría que convocarse una asamblea de socios en la que decidirán si quieren que el Rey continúe como presidente de honor de WWF.
El secretario general de WWF España, Juan Carlos del Olmo, transmitió a la Casa Real su descontento. En la carta, solicita una reunión con las autoridades reales para comunicarle a Don Juan Carlos "el malestar y la preocupación" de WWF, a la vez que se le pedirá a Juan Carlos que deje de ser el presidente de honor de WWF, un cargo que ostenta desde la fundación de la organización en 1968.
Oso ruso. Años atrás, el monarca español se vio envuelto en otra polémica por su afición a la caza, esta vez en Rusia. Se lo acusaba de haber matado a un oso borracho en una de sus expediciones. De acuerdo con las versiones que así lo indicaban, los organizadores de una cacería, deseosos de facilitar al rey Juan Carlos la muerte de un oso, proporcionaron un ejemplar domesticado al que habían dado vodka.
El diario nacional Kommersant publicó una carta del subdelegado de la administración de recursos de caza regionales, Sergei Starostin, que acusa a los organizadores de la cacería de emplear a un oso en cautiverio llamado Mitrofan, darle una mezcla de vodka con miel y después obligarlo a salir de su jaula para ser disparado por el monarca español.
Por ese entonces, no hubo reacciones inmediatas de la Casa Real Española.