La "guerra del gas" entre Rusia y Ucrania sigue: el gigante ruso Gazprom anunció medidas para desalentar el "robo" del hidrocarburo por parte ucraniana, mientras los europeos quitaban dramatismo y mantenían la calma pese a las disminuciones de suministro notadas por varios países.
Moscú y Kiev siguieron acusándose mutuamente por las perturbaciones provocadas por su falta de acuerdo sobre el precio de los suministros de gas ruso para 2009 y la deuda por los correspondientes a varios meses de 2008.
En Moscú, el primer ministro ruso, Vladimir Putin, se reunió con el presidente de Gazprom, Alexei Miller, quien acusó a Ucrania de haber robado 65,3 millones de metros cúbicos de gas ruso desde el 1 de enero.
Un portavoz de la empresa ucraniana estatal Naftogaz lo desmintió. No obstante, Putin ordenó a Gazprom reducir en esa misma medida los suministros hacia Europa realizados a través de Ucrania y seguir actuando para prevenir más "robos" de hidrocarburo en el futuro. Por su parte, Miller prometió que el gigante ruso seguirá abasteciendo de gas a sus clientes europeos a través de Belarús, Polonia y Turquía.,sin pasar por suelo ucraniano.
Rusia cortó el suministro de gas a Ucrania el 1 de enero debido a retrasos en el pago de 1600 millones de dólares por el gas de noviembre y diciembre, así como 500 millones más de multa por el retraso. Sin embargo, el 80% de las exportaciones de gas ruso destinadas a Europa siguen pasando por territorio ucraniano.
Una delegación de altos responsables de la Presidencia checa de turno de la Unión Europea y de la Comisión Europea llegó a Kiev, según confirmó Naftogaz, y tienen previsto reunirse hoy con representantes de Gazprom "en una capital europea" no precisada.
Mientras tanto, varios países constataron importantes disminuciones en sus aprovisionamientos de gas ruso, como Rumanía (30%), Hungría (alrededor del 20%) o la República Checa (9,5%).
Bulgaria, donde los suministros han disminuido entre un 15 y un 17%, pidió a las grandes empresas del país que limiten su consumo de gas hasta que se resuelva el conflicto ruso-ucraniano. Este coincide con una oleada de frío que azota toda Europa y que puede conllevar el aumento inmediato del consumo de gas en el continente.
Ucrania exige que sea reconocido como no válido el acuerdo alcanzado en 2006 con Rusia sobre el tránsito del gas ruso por su territorio y logró su suspensión provisional por parte de un tribunal ucraniano, informó Kiev. Sin embargo, el portavoz de Gazprom, Sergei Kuprianov, calificó el lunes esta decisión judicial de "ilegítima".
Fuente: AFP