Don Torcuato: una familia estuvo siete horas como rehén

Un matrimonio y sus dos pequeñas hijas vivieron hoy una odisea de casi siete horas, al ser tomados como rehenes en su casa de la localidad bonaerense de Don Torcuato por tres delincuentes que primero liberaron a la mujer, luego a las niñas y por último al hombre, para finalmente entregarse a la Policía.

Los detenidos son un joven de 23 años que hace tres meses salió de la cárcel y estaba con "libertad asistida", otro de 24 años y un menor de edad, quienes también tendrían antecedentes policiales, informaron fuentes del caso.

El episodio se inició a las 6.50 cuando la mujer, de nombre María Julia, abordó su camioneta estacionada frente a su domicilio, un elegante chalé de la calle Huergo, entre Belgrano y Alem del barrio "Gutiérrez", ubicado detrás del Hindú Club, para llevar a sus hijas al colegio. Al poner en marcha el vehículo la mujer fue interceptada por tres asaltantes que a punta de pistola la obligaron a entrar en la vivienda, donde se encontraban su esposo, Julián Taborda, de 36 años, empleado de un comercio de náutica, y sus dos hijas, de 8 y 12 años.

Si bien una versión indicaba que los asaltantes -quienes se movilizaban en un vetusto automóvil- escapaban de un raid delictivo, otra señaló que eligieron la casa "al voleo" para robar. Martín, un hermano de la mujer que vive en la misma cuadra, vio la situación, llamó al 911 y rápidamente concurrieron al lugar varios móviles policiales.

Al no poder escapar, los asaltantes se atrincheraron en la casa y tomaron como rehén a la familia. Enseguida, unos 70 efectivos del Grupo Halcón de la Policía Bonaerense rodearon la manzana y comenzaron a negociar con los delincuentes. En declaraciones a la prensa esta noche, Taborda y su esposa señalaron además que los delincuentes los trataron bien, nunca mostraron armas y hasta tomaron mate con ellos.

Señaló que los asaltantes no quisieron tomarlos como rehenes, pero "se les complicó porque llegó la Policía". María Julia señaló que, en realidad, a ella la dejaron salir como una señal a la Policía de sus intenciones de negociar.
Y su esposo dijo que, salvo cuando irrumpieron en la casa, los ladrones "en ningún momento fueron agresivos" y "nunca mostraron el arma".

Según contó también el hermano de María Julia a la prensa, la mujer encerró a sus hijas en un "dormitorio con llave", para que "queden afuera de todo el robo", pero los delincuentes entraron en la habitación y "las sacaron". La mujer fue liberada a poco de iniciada la toma de rehenes, no sólo porque se encontraba muy nerviosa sino porque, además, los intrusos le pidieron que diera a conocer sus exigencias: un automóvil para poder escapar, lo que fue rechazado por la policía. Así pasaron las horas, aunque los asaltantes se mostraron "tranquilos" durante la negociación y "no hubo actitud de violencia" de parte de ellos, indicaron voceros policiales.

En el lugar, donde las casas linderas fueron evacuadas y se instaló un vallado, había médicos y un equipo de especialistas del Centro de Protección de los Derechos de las Víctimas del gobierno bonaerense, encabezado por Alberto Linares. Una hermana de uno de los malvivientes, a pedido del ladrón, intervino en la negociación, según indicó el segundo jefe de la Departamental del Conurbano Norte, inspector Osvaldo Carmona. Poco antes de las 13 los ladrones decidieron liberar a las dos niñas -en forma separada- y una hora más tarde hicieron lo propio con Taborda, para luego entregarse a la Policía, que los detuvo.
Luego de la odisea toda la familia fue trasladada sana y salva a una casa familiar, donde fue contenida por personal especializado de la policía y del Ministerio de Seguridad.

"No los maltrataron, mi cuñado está bien y mi hermana también, no les pegaron", había anticipado Martín.
Según fuentes vinculadas al caso, los delincuentes serían oriundos de un asentamiento de la localidad de Boulogne. Uno de los maleantes, de 23 años, salió hace tres meses de una cárcel ubicada en la provincia de Buenos Aires -donde cumplía pena por robo calificado y otros delitos- y se encontraba con "libertad asistida" (paso previo a la libertad condicional), dijeron los voceros.

El otro mayor aparentemente tenía documentos falsos y el menor de edad también tendría antecedentes penales.
Vecinos de la zona se quejaron por la falta de seguridad en el barrio donde hace unos meses fue asaltado y herido de bala el actor Juan Vitali. Los detenidos fueron llevados a la comisaría tercera de Don Torcuato, donde quedaron a disposición del fiscal de Tigre Santiago Quian Zavalía y la Justicia de Menores en turno de San Isidro.

Fuente: Dyn