A una semana de haber lanzado su candidatura al Senado, Cristina Kirchner tuvos dos apariciones de campaña. Hizo una visita al Conurbano el jueves y ayer mantuvo una videollamada con un panadero de Santiago del Estero, crítico de la gestión de Mauricio Macri.
El nuevo estilo kirchnerista, que implica un discurso más moderado y enfocado en los problemas de “la gente”, anticipa una batalla diferente entre la ex presidenta y los candidatos de Cambiemos, que utilizan las mismas técnicas de comunicación política.
La semana que viene, CFK hará una foto grupal con todos sus candidatos en el Instituto Patria, su fundación política, ubicada cerca del Congreso. En paralelo, su entorno planifica más recorridas por el Gran Buenos Aires. El jueves, la ex presidenta había estado en una fábrica de cuero en San Martín, distrito “randazzista” gobernado por Gabriel Katopodis. La estrategia es “hablar menos y escuchar más”, según definen en el entorno de Cristina, una ecuación que mientras ella estaba en el poder era inversa.
Pero ninguna de sus elecciones son casuales. La fábrica de San Martín está en manos de una cooperativa de trabajadores comandada por el sindicalista del cuero Jorge Reisch, ex empleado municipal alineado con Katopodis, que hoy está con Randazzo.
Lo que fue a mostrar Cristina Kirchner es la realidad económica de la cooperativa, que tiene gastos de más de un millón de pesos entre luz, gas y agua, y se le complica mantener el nivel de producción. La empresa tiene 75 empleados. El panadero, elegido ayer por CFK para dialogar por videollamada, había sido protagonista de un video “viral” que circuló por las redes sociales en la semana, en el que él canta y pide que vuelva la ex presidenta, y se queja de la situación económica actual.
Con una postura descontracturada, Cristina habló con Gabriel, de Santiago del Estero, durante varios minutos, pero el video salió editado en casi seis minutos. El kirchnerismo promete más apariciones como esas, y menos actos masivos, bien al estilo PRO.
Dan de baja 62 listas de concejales La Junta Electoral partidaria del frente Unidad Ciudana, que encabeza Cristina Kirchner, dio de baja por “falta de avales” a 62 listas de concejales que buscaban competir en 37 distritos de la Provincia. Según lo expresado en la resolución, esas nóminas “no pueden ser oficializadas” ya que “no reúnen los requisitos establecidos”. Algunos de los dirigentes que quedarían afuera de la elección son el ex embajador en Bolivia Ariel Basteiro (Ituzaingó); el titular del PJ de Hurlingham, Raúl Zurita; el ex coordinador de Fútbol para Todos Guillermo Paladino (Lomas de Zamora); el senador provincial Alberto de Fazio (Quilmes); el concejal Gabriel Di Massi (Lanús) y el ex embajador en Venezuela Carlos Cheppi (General Pueyrredón). Habrá internas en 44 de 135 municipios.
