“Este será un año medio complicado”, dijo entre risas Mauricio Macri en su cumpleaños 59 al hacer referencia a la proximidad de los 60. Y finalmente lo fue, pero no como pensaba. El Presidente llegó al festejo con el país en una situación económica delicada y comenzando la campaña para su reelección. Por ese motivo él y su entorno decidieron que la celebración fuera de bajo perfil.
El lugar elegido para pasar el fin de semana fue la residencia presidencial de Chapadmalal. Este viernes por la tarde un grupo de amigos y familiares del mandatario partió hacia el lugar con el objetivo de acompañarlo y disfrutar con él. “Es algo muy íntimo y serán pocas personas”, explicaron desde su entorno y agregaron que la idea es no llamar mucho la atención sino hacer algo tranquilo.
Dentro del grupo de acompañantes se encuentra su esposa, Juliana Awada, su hija Antonia y amigos de toda la vida. Uno de los objetivos fue que no trascendiera quiénes o cuántos son para no opacar la celebración. De todas formas, se supo que algunos de ellos podrían ser Gustavo Arribas, titular de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) y de su mayor confianza, Pablo Clusellas y José Torello, que lo conocen del colegio Cardenal Newman, el actor Martín Seefeld, que ya participó de otros cumpleaños, y Hernán Nesembaum, vocero de la AFI. Además, Agustina Macri, la hija cineasta de Mauricio, se encuentra en Balcarce finalizando el rodaje de una serie sobre la vida del corredor Juan Manuel Fangio y también podría sumarse. Por último, se dio a conocer que habrían invitado a Mirtha Legrand. La conductora se encuentra haciendo su programa en la costa y podría visitar al Presidente, pero aún no confirmó su asistencia.
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Descanso. Ayer por la noche se llevó a cabo el festejo y brindis por los 60 años. Para esta ocasión no contrataron a las empresas de catering que suelen hacer la comida para este tipo de eventos sino que por cuestiones de logística y transporte optaron por una de la zona.
A partir de hoy inician los planes de esparcimiento. La idea de todo el grupo es descansar y hacer deportes al aire libre. Algunas de las opciones preferidas de Macri son pádel, tenis, fútbol y golf. Para eso deberá moverse por la zona, por lo que se espera que pase algunas horas por Mar del Plata. De todas formas, también podría recluirse dentro de la residencia y pasar allí los próximos dos días. Lo cierto es que hasta el domingo estarán en Chapadmalal y luego emprenderán la vuelta a Buenos Aires para retomar la agenda oficial.
Campaña. Antes de todo esto, Macri decidió mostrarse junto a María Eugenia Vidal y Horacio Rodríguez Larreta en la inauguración de una de las obras de la red de desagües cloacales más grandes de su gestión.
“Es lindo arrancar el cumpleaños de Mauricio juntos y en la Provincia”, dijo la gobernadora, mientras que el Presidente aseguró que van a comprometerse a trabajar más, y en su caso por otros sesenta años. Según pudo saber PERFIL, el único pedido especial que se realizó desde el Gobierno fue una torta de bizcocho de vainilla y banana con dulce de leche, chocolate blanco, cobertura de merengue y flores de la huerta que mantiene personalmente Juliana Awada. Tras cantar el feliz cumpleaños y soplar las velas, Macri saludó a los trabajadores y les repartió porciones de torta para comer junto a ellos.
Luego del acto fue hacia la quinta de Olivos, donde mantuvo un almuerzo privado con algunos funcionarios cercanos a él y realizó fotos oficiales junto a su familia. De esta manera se buscó mostrarlo feliz por su cumpleaños pero concentrado en las elecciones.
Su edad, su padre y la muerte
Pocas horas antes de que iniciara su cumpleaños, Mauricio Macri apareció en una pequeña entrevista que le realizó su asesor Alejandro Rozitchner. Allí habló sobre temas como la edad, la muerte y su padre Franco.
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“Ya me está costando asumir este dígito. Tengo patente cuando cumplió 60 mi viejo y pensé ‘Qué viejo está’. Yo tenía 30 y me parecía que era una edad imposible de llegar, y de pronto llegó”, explicó.
Al ser consultado sobre la muerte, aseguró que se proyecta hasta los 85 con buena independencia motriz y mental. “Me gustaría que me tocara una muerte rápida y no estar atrapado entre la vida y la muerte. Se me murieron varios amigos de golpe y eso me pegó mucho. Estoy aprendiendo a socializar. Cada vez estoy más convencido de que pobres somos los que nos quedamos. No el que se fue”, afirmó.
Y por último tocó un tema delicado para él, su padre Franco. “Hace un año que no tengo contacto consciente con él, y el último que tuve me pidió una pastilla para sacarlo de acá, pero le dije que eso no se puede hacer. El me dijo que ya había terminado, que no tenía nada para hacer y que no podía hacer nada sin depender de terceros, pero igual le dije que no”, finalizó.
