La ecuación sería así: aquí tienen menos contactos íntimos pero llegan más al éxtasis. Mientras casi la mitad de las mujeres de la tierra del samba y el carnaval hacen el amor tres veces por semana, en la Argentina apenas un afortunado 25% logra esa frecuencia (si sirve de consuelo, en México ese porcentaje es de sólo el 17%). Pero a la hora de los orgasmos, las criollas son las primeras. El 77% de las encuestadas argentinas dijo alcanzarlo “siempre o usualmente”, contra el 67% de las brasileñas.
¿ Exageración argentina? ¿Modestia brasileña? ¿O es que, finalmente, el macho argentino no está tan en decadencia como se suponía? Los especialistas indican que haría falta algún estudio cualitativo para comprobarlo, pero, mientras tanto, hagan sus apuestas.
Especiales. Los datos sobre hábitos sexuales femeninos forman parte de una encuesta encargada por la empresa que comercializa el gel íntimo K-Y Gel e incluyó a 11 países de 4 continentes. Si bien el objetivo era testear la posibilidad de extender el uso de productos lubricantes, lo cierto es que el resultado aportó una buena radiografía sobre conductas sexuales. En América latina, se consultó a 1.800 mujeres de Argentina, Brasil y México (600 en cada país). Todas debían ser de entre 18 y 65 años y tener al menos una relación sexual cada tres meses.
En cuanto al promedio de compañeros sexuales, el 81% de las argentinas manifestó haber tenido sólo uno en el último año; el 13%, dos; y apenas el 6% dijo que cambiaba de partenaire de cama en más de dos ocasiones. El dato optimista es que a la hora de evaluar la satisfacción sexual, los guarismos fueron altos: 82% en Brasil, 86% en la Argentina y 90% en México dijeron estar alta o moderadamente satisfechas.
Sin embargo, consultadas sobre si se creían sexies, sólo el 43% de las argentinas manifestó que sí, contra el 73% de las mexicanas y el 69% de las brasileñas. ¿Baja autoestima o pura modestia? En síntesis, y en la comparación global, la muestra determinó que la idea de que “para hacer bien el amor hay que venir al Sur” sigue vigente: los países latinos tienen la duración y frecuencia más alta en práctica sexual. Eso, al menos, es lo que señalan las mujeres de por aquí.
Incógnita. Pero, ¿cómo es posible tener más orgasmos con menos frecuencia de actos venéreos? Para el sexólogo León Gindín puede ser debido a que la penetración no es la única manera de obtener el máximo placer. “ Habría que ver de qué forma se alcanza el orgasmo porque también existen el sexo oral y la posibilidad de manipulación tanto por parte de su compañero como propia”, indicó el profesor titular de Sexología y Salud de la Universidad Abierta Interamericana.
Gindín también advirtió que ese 77% que dice alcanzar frecuentemente orgasmos –“ un muy buen porcentaje”–, no debe encandilar lo que sucede con el otro 23% que llega “ a veces” o “ raramente”. “ Esas son realmente el problema: mujeres que se acercan cada vez más a los consultorios para terapia sexual, tratamientos varios y aprendizaje de conducta sexual”, señaló.
Kinga Siemaszko, del servicio de Ginecología del Hospital de Clínicas, expresó que la gran satisfacción de las mujeres argentinas fue una sorpresa para ella. “ No es precisamente lo que se ve en el consultorio... pero, claro, si vienen acá es porque ya algo les pasa”, dijo.
Siemaszko también manifestó su preocupación porque cada vez se cambia más de pareja. “ Es un estilo mundial, y no hay muchos tabúes en esto de modificar el compañero, lo que es riesgoso cuando son muy jóvenes. Se cometen errores al no cuidarse: infecciones y embarazos”, opinó.
La última curiosidad de la encuesta es que las argentinas registraron el porcentaje más bajo de respuestas afirmativas a la pregunta de si “ el sexo es sólo para la procreación” (idea que aún mantiene la Iglesia católica, todavía con amplia mayoría de acólitos en la región): el 2% contra el 9% y 10% de brasileñas y mexicanas respectivamente. Es decir, acá lo hacen por diversión.