Aunque todavía falta la confirmación oficial, que seguramente se producirá mañana cuando Lionel Scaloni dé a conocer la nómina de los jugadores convocados para los amistosos que la Selección argentina jugará a finales de este mes ante Venezuela, en Madrid, y frente a Marruecos, en Tánger, el regreso de Lionel Messi a la albiceleste es un hecho. Así como también lo hará el actual delantero del PSG, Angel Di María, quien al igual que Lio se había alejado del grupo tras el Mundial de Rusia 2018.
Cabe destacar que en estos siete meses de ausencia, Messi siempre estuvo al tanto de lo que sucedía en el predio de Ezeiza con sus ex compañeros, y tras los primeros partidos que la Selección jugó después de Rusia empezó a mantener una serie de charlas con Lionel Scaloni, –técnico por el que ya tenía un gran respeto y admiración antes de que fuera convocado para dirigir a la Selección Mayor–, que contaron con el total apoyo e interés del presidente de la AFA, Claudio “Chiqui” Tapia, uno de los más interesados en su vuelta.
Y en lo que va de este año, los encuentros entre Messi y Scaloni no solo se hicieron mucho más frecuentes sino que, según allegados al cuerpo técnico argentino, fueron determinantes para que la estrella aceptara regresar al grupo. Así lo deslizó el propio entrenador cuando, tras el sorteo de la Copa América, se aventuró a decir que tenía “buenas sensaciones acerca de la vuelta de Messi a la Selección argentina”. Es claro que, ya por entonces, Scaloni contaba con el visto bueno del capitán.
Solo resta esperar que mañana el entrenador argentino confirme oficialmente que Messi estará entre los convocados para el amistoso que Argentina disputará ante Venezuela el viernes 22 de marzo en el estadio Wanda Metropolitano de Madrid. Cuatro días antes del otro amistoso ante Marruecos en el que Lio no sería de la partida por cuestiones vinculadas a la exigente agenda de partidos que deberá disputar Barcelona en las próximas semanas, y en los que Messi ya le manifestó a Scaloni que quiere estar presente. Como siempre, Messi tiene la última palabra.
Amistoso con sabor a revancha
La Selección argentina tendrá un importante examen en su etapa de reconstrucción cuando en el mes de octubre próximo visite a Alemania en Dortmund, según anunció ayer la Federación Alemana de Fútbol (DFB). “La dirección deportiva había explícitamente solicitado poder jugar lo antes posible contra un equipo muy grande para probar y continuar”, declaró el presidente de la DFB Reinhard Grindel.
El 9 de octubre, entonces, Argentina y Alemania –ganadores de seis Mundiales entre ambos– reeditarán la final de la Copa del Mundo 2014, con victoria 1-0 en la prórroga para el equipo europeo. Dos meses después chocaron en Dusseldorf, en un amistoso, y Argentina ganó 4-2, lo que significó el último enfrentamiento entre ambos.