Ante la resolución de la Cámara de Apelaciones de Estados Unidos de levantar la suspensión dictada por el juez Thomas Griesa, el ministerio de Economía publicó en su página web una dura respuesta en la que "lamenta la decisión" ya que muestra la "inexistencia de voluntad de negociación". "Le impiden a la Argentina efectuar el próximo 30 de junio el pago de cupones de deuda", manifestó el comunicado de prensa.
El levantamiento del "stay" de las medidas cautelares pari passu, según el Palacio de Hacienda, traban cualquier cumplimiento de pago del país con los acreedores reestructurados. En el hipotético hecho de que el Gobierno avance con el pago debería desembolsar la totalidad de lo exigido por los fondos buitre. Una suma cerca a los 15 mil millones de dólares.
La cartera conducida por Axel Kicillof pronunció su descontento porque la resolución judicial "muestra la inexistencia de voluntad de negociación en condiciones distintas a las de la sentencia dictada por Griesa".
El comunicado finaliza indicando que "Argentina reitera la voluntad de pago a sus acreedores reestructurados, ya que siempre ha ofrecido pagar bajo las mismas condiciones y en concordancia con la ley del país".