La estimación de crecimiento argentino previsto en la ley de Presupuesto 2007 es "conservadora". Por lo menos, así lo estimaron algunos referentes de la oposición que acusaron al Gobierno de "subestimar el presupuesto", tras la defensa que hizo de esa norma esta mañana la ministra de Economía, Felisa Miceli.
" Plantea un crecimiento del 4 por ciento cuando el arrastre del 2006 será del 3 o 3,5 por ciento", explicó el vicepresidente de la comisión de Presupuesto y Hacienda, el radical Miguel Angel Giubergia.
La crítica de Giubergia es uno de los principales puntos que rechaza la oposición: acusan al Gobierno de “subestimar el crecimiento” para después poder gastar el excedente –que no se presupuestó- de forma discrecional en un año fuertemente marcado por las elecciones de octubre. "Toda esa masa de dinero que no está proyectada da lugar a un manejo total y discrecional del gobierno", sostuvo.
Por su parte, Claudio Lozano (CTA-Capital) manifestó que con la tasa de crecimiento del 4 por ciento “se están ocultando 8 mil millones de pesos que deberíamos discutir democráticamente” y señaló que el gobierno de Kirchner "mantiene una lógica presupuestaria de carácter desarrollista que apuntala a las mayores empresas del país pero sin cambios en política social".
El jefe del bloque del Peronismo Nacional, el bonaerense Jorge Sarghini, fue todavía más lejos y calificó al proyecto como “una farsa” porque, dado que cuentan con una ley de superpoderes, “el Gobierno dice esto es lo que digo que voy a hacer pero tengan en cuenta que puedo hacer cualquier otra cosa".
Por el lado del ARI, Adrián Pérez lamentó que tampoco para el año próximo el Gobierno piense en una reforma tributaria ni "en una reforma previsional integral", mientras que el socialista Hermes Binner advirtió que existe en el presupuesto "una subvaloración de la inflación" lo cual aumentará aún más los 8 mil millones de pesos excedentes que el Congreso no discutirá del presupuesto.
La versión oficial. En tanto, Miceli , había anticpado hoy que si la economía crece el año que viene por encima del 4 por ciento presupuestado, el excedente será destinado a aumentar los haberes jubilatorios, los sueldos de estatales y las partidas para educación, ciencia y tecnología.
" Plantea un crecimiento del 4 por ciento cuando el arrastre del 2006 será del 3 o 3,5 por ciento", explicó el vicepresidente de la comisión de Presupuesto y Hacienda, el radical Miguel Angel Giubergia.
La crítica de Giubergia es uno de los principales puntos que rechaza la oposición: acusan al Gobierno de “subestimar el crecimiento” para después poder gastar el excedente –que no se presupuestó- de forma discrecional en un año fuertemente marcado por las elecciones de octubre. "Toda esa masa de dinero que no está proyectada da lugar a un manejo total y discrecional del gobierno", sostuvo.
Por su parte, Claudio Lozano (CTA-Capital) manifestó que con la tasa de crecimiento del 4 por ciento “se están ocultando 8 mil millones de pesos que deberíamos discutir democráticamente” y señaló que el gobierno de Kirchner "mantiene una lógica presupuestaria de carácter desarrollista que apuntala a las mayores empresas del país pero sin cambios en política social".
El jefe del bloque del Peronismo Nacional, el bonaerense Jorge Sarghini, fue todavía más lejos y calificó al proyecto como “una farsa” porque, dado que cuentan con una ley de superpoderes, “el Gobierno dice esto es lo que digo que voy a hacer pero tengan en cuenta que puedo hacer cualquier otra cosa".
Por el lado del ARI, Adrián Pérez lamentó que tampoco para el año próximo el Gobierno piense en una reforma tributaria ni "en una reforma previsional integral", mientras que el socialista Hermes Binner advirtió que existe en el presupuesto "una subvaloración de la inflación" lo cual aumentará aún más los 8 mil millones de pesos excedentes que el Congreso no discutirá del presupuesto.
La versión oficial. En tanto, Miceli , había anticpado hoy que si la economía crece el año que viene por encima del 4 por ciento presupuestado, el excedente será destinado a aumentar los haberes jubilatorios, los sueldos de estatales y las partidas para educación, ciencia y tecnología.
La titula de Hacienda adelantó además, que "esta semana" la Argentina estará " recomponiendo el nivel de reservas" que tenía a principios de año cuando canceló la deuda con el Fondo Monetario Internacional (FMI).
La inflación, según la norma presentada, oscilaría entre un 8 y un 11 por ciento. Por otro lado, se proyecta un incremento de la inversión del 7,2 por ciento y un aumento de las exportaciones e importaciones del 7,8 y el 10,7 por ciento, respectivamente.
Al hablar en el salón de conferencia de la Cámara de Diputados, en presencia de los miembros de la Comisión de Presupuesto y Hacienda de ese cuerpo, la jefa de la cartera económica destacó como pilares de la economía "el mantenimiento del tipo de cambio a niveles flexible y competitivo y los superávits fiscal y externo, respectivamente". El dólar seguiría flotando entre $3,10 y $3,20, como forma de mantener la competitividad externa, según la ley.
En cuanto a la estimación de 4 por ciento para el crecimiento del producto bruto interno (PBI), Miceli salió al cruce de las proyecciones privadas que indican que será superior. "Entendemos que generar expectativas de recursos que habilitan a gastos es volver al pasado y es incompatible con una administración responsable", sostuvo la funcionaria.
Al respecto, destacó que " nuestro Gobierno será absolutamente responsable y si el crecimiento de los recursos es mayor a lo presupuestado, se destinará a aumentar el gasto previsional, la educación y el salario de la administración pública".
Partidas. Por otro lado, según se informó, la ministra dio cuenta de las partidas destinadas a la seguridad social (obras de infraestrucutura, entre otras cosas) que tendrán un incremento del 29,3%, incluyendo el aumento -en realidad es una recomposición teniendo en cuenta la inflación pronosticada para este año- del 13% en los haberes de todos los jubilados a partir del 1 de enero del año entrante.
Los recursos sobrantes que se volcarán a las áreas de educación, ciencia y tecnología, tendrán un incremento de 1.569,1 millones de pesos respecto de 2006. Sin embargo, tal como ocurriera el año pasado, el Gobierno no aportaría recursos al fondo anticíclico.
Los recursos sobrantes que se volcarán a las áreas de educación, ciencia y tecnología, tendrán un incremento de 1.569,1 millones de pesos respecto de 2006. Sin embargo, tal como ocurriera el año pasado, el Gobierno no aportaría recursos al fondo anticíclico.