El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, y los líderes del Congreso no lograron un acuerdo, pero estrecharon sus diferencias, en una amarga disputa sobre el presupuesto que podría dejar al Gobierno sin fondos.
Obama espera una respuesta hoy por la mañana sobre si es posible evitar que el Gobierno se quede sin fondos la medianoche del viernes, lo que dejaría a cientos de miles de trabajadores inactivos y pondría un obstáculo a la recuperación económica de Estados Unidos.
El mandatario se reunió durante una hora con el líder del Senado, el demócrata Harry Reid, y el presidente de la Cámara de Representantes, el republicano John Boehner, en la Casa Blanca. Fue la cuarta reunión del grupo en tres días.
"No estoy preparado para expresar un optimismo desenfrenado", dijo Obama a periodistas después de la reunión nocturna, en la segunda noche consecutiva en la que intenta lograr avances en la sala de reuniones de la Casa Blanca respecto a la difícil búsqueda de un acuerdo sobre el presupuesto.
Ningún bando parece dispuesto aún a realizar una concesión final necesaria para alcanzar el acuerdo.
"Hemos estrechado los temas, sin embargo, aún no hemos alcanzado un acuerdo. Nosotros seguiremos trabajando durante la noche para intentar resolver nuestras diferencias pendientes", dijeron Reid y Boehner en un comunicado conjunto.
Los demócratas culpan del estancamiento a la campaña republicana por aplicar provisiones políticas que bloquearían los fondos públicos para el control de la natalidad y obstaculizarían los esfuerzos de protección medioambiental.
Pero Boehner dijo que las divisiones no terminan ahí. "Hay varios temas que están sobre la mesa. Y cualquier intento por intentar reducir esto a uno o dos temas simplemente no sería preciso", declaró.
El plazo para evitar que el Gobierno se quede sin fondos es la medianoche del viernes. Algunas cadenas de televisión por cable incluyeron un reloj con la cuenta atrás del tiempo restante.
Fuente: Reuters.