El ministro de Hacienda, Alfonso Prat-Gay, dijo ayer que el Gobierno “hará un esfuerzo” orientado a los sectores de menores ingresos hacia fin de año y que “seguramente” se exceptuará del pago del impuesto a las Ganancias al medio aguinaldo de diciembre. Fue un nuevo gesto orientado a evitar un paro de la CGT después de reunirse con los jefes sindicales. Sin embargo, el ministro advirtió que aún no está definida “la forma” en que se instrumentará el cambio en el impuesto a las Ganancias.
En tanto, dentro del sindicalismo sigue la puja para definir una medida de fuerza. Juan Carlos Schmid, uno de los jefes de la CGT, se quejó cuando escuchó que Pablo Micheli, de la CTA, y algunos gremios kirchneristas, que están dentro de la central obrera, trataban de cómplices del Gobierno al triunvirato, por salir satisfechos de la reunión con los ministros que se celebró el jueves pasado.
En efecto, tanto Schmid, como Héctor Daer y Carlos Acuña están conformes con el resultado del encuentro con los ministros Jorge Triaca, Rogelio Frigerio, Alfonso Prat-Gay y Francisco Cabrera.
La promesa de solucionar algunos de los reclamos de la CGT desinfló el clima de huelga general que había hasta el Comité Confederal, que se reunió hace una semana, y que habilitó al triunvirato a definir la fecha de una medida de fuerza. El jueves a la noche, Schmid charló a solas con Frigerio durante una cena que tuvieron en el gremio de Sanidad. Los dos se mostraron optimistas por el avance de las negociaciones. Según dijeron a PERFIL fuentes del sindicalismo, la CGT no sólo quiere que se resuelvan sus reclamos, sino ver que se toman medidas para reactivar la economía porque, en definitiva, eso “aliviará a todos los trabajadores”.
Pero los más duros insisten con el paro. Ayer, Pablo Moyano, de Camioneros, dijo que el Gobierno sólo dará “migajas”, en referencia a la posibilidad del bono de fin de año y la eximición de Ganancias del medio aguinaldo. Y solicitó que el movimiento sindical reaccione. “No creo que tenga el Presidente (Mauricio Macri) la sensibilidad y la rapidez para solucionar algunos temas, como se benefició en los primeros meses a un sector. Tiene que haber una reacción del movimiento obrero”, indicó Moyano.
El bono y la eximición de Ganancias son dos de las medidas que pide la central obrera para desactivar una protesta. La CGT, igual, sabe que es mejor que el oficialismo dé señales, porque una huelga es rechazada por la opinión pública en general.