"Por plata, por dinero, obviamente". Así justifica Gregorio Dalbón, abogado querellante en el juicio por la Tragedia de Once, que algunos familiares de las víctimas hayan desistido de demandar al Estado Nacional.
"Por plata de quien les haya pagado, evidentemente. Yo no puedo decirle qué imagino porque no sería serio, pero pregúntele a Marcelo Parrilli, María del Carmén Verdú y Miguel Arce Aggeo, que son los que se bajaron", remató el letrado ante la consulta de quién les pagó.
"A ellos les pagaron, imagino yo porque no se van a bajar gratuitamente, pero no me parece mal", agregó en diálogo con el programa Ahora es Nuestra la Ciudad que se emite por FM Identidad 92.1. Sostuvo que le "llama mucho la atención" dado que Parrilli y Verdú "son excelentes abogados, siempre han estado en cuestiones de derechos humanos y han defendido a las víctimas". Y defendió la decisión porque "es una forma de resolver el conflicto" y "no es la muerte de nadie".
Dalbón dijo que "desprecia" a Ricardo Jaime, exsecretario de Transporte de la Nación y uno de los 29 imputados en la causa, y recordó que pidió su detención. También reclamó custodia para Marcos Córdoba, el maquinista de la formación que chocó en la estación de Once, "por lo que pasó con Andrada", el testigo asesinado a balazos el año pasado.
El abogado también habló de su relación con el juez federal Norberto Oyarbide, con quien fue visto festejando en un restaurante de Puerto Madero. "Tengo relación con todo el mundo y no me avergüenza", justificó, porque "la relación del abogado con un juez es normal". "En otro país del mundo el juez toma un whisky en la barra con el abogado y después en el juicio se matan", agregó.
