Javier Perazzo, padre de la nena de tres años que falleció luego del derrumbe de un acantilado en Mar del Plata afirmó que no había ningún cartel que indicara el peligro o la precaución para transitar por ese lugar.
El padre de la menor aseguró a La Nación Más que “Emma estaba sentada, no jugando o saltando, escuché un estruendo y no encontré a mi hija". y agregó que “no somos padres inconscientes, no había ningún cartel que nos indicara el riesgo".
La ambulancia tardó más de una hora en llegar para asistir a la víctima. Como si la situación ya fuera desgarradora para los padres Javier volvió al lugar del accidente y la zona seguía sin estar señalizada ni tampoco con personal que advierta del peligro. Sobre esto comentó “Se gasta tanto en pavadas. Hay que hacerlo antes de que vuelva a ocurrir lo que le pasó a mi hija. Creo que fue un accidente, pero que se puede evitar con un poco de información".
Desde la gobernación no mostraron preocupación por la muerte de la niña de dos años y 8 meses que fue golpeada, en la playa Las Delicias en la zona norte de Mar del Plata, por los trozos que cayeron sobre ella y le quitaron la vida.
La menor estaba sentada a la sombra cuando sucedió. Equipos de bañeros le realizaron prácticas de reanimación mientras esperaban por la ambulancia y finalmente falleció en el Hospital Interzonal Especializado Materno Infantil cerca de las 15 horas, una hora después de su ingreso.