La presidenta de la comisión de Comercio de la Cámara de Diputados, Juliana Di Tullio (FPV), sostuvo en el recinto que el proyecto del PEN tiene por fin "garantizar la libertad de imprenta de todos aquellos que necesitan tener ese bien, ese continente, para expresarse en un medio escrito".
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Además, negó que durante la discusión previa del proyecto no se haya querido recibir a representantes de los diarios accionistas de Papel Prensa y recordó que durante las audiencias públicas que la comisión organizó el año pasado "todos estuvieron invitados" para exponer su posición.
El texto defendido por el kirchnerismo es una fusión de dos mensajes enviados por el Poder Ejecutivo Nacional el año pasado y define como de "interés público la fabricación, comercialización y distribución de pasta celulosa y de papel para diarios", además de establecer el marco regulatorio para garantizar la actividad y el acceso al insumo de todos los diarios del país en igualdad de precios.
El diputado radical Juan Pedro Tunessi sostuvo que el objetivo real del oficialismo es "estatizar Papel Prensa" para "quedarse con el control del monopolio del Estado" y "desde allí cercenar" a los medios opositores al Gobierno.
El legislador afirmó que la iniciativa que aspira sancionar el kirchnerismo "se parece mucho a la revancha, al desquite, se parece mucho al rencor" y a "saldar viejas deudas", al tiempo que el ex candidato presidencial Ricardo Alfonsín subrayó que el "genera condiciones para que el Poder Ejecutivo pueda intervenir de manera negativa en la libertad de expresión".
Voces en contra. En esto último coincidió Oscar Aguad (UCR), quien no dudó que el proyecto de ley para reglamentar la fabricación y distribución del papel para prensa "tiene como finalidad una revancha contra los medios que son críticos" al Gobierno.
"Si el oficialismo quisiera democratizar la información -marcó Aguad- hoy estaríamos en este recinto tratando la ley de acceso a la información pública, la distribución de la pauta oficial que subió de 43 millones de pesos a 1.500 millones de pesos" desde 2003.
Eduardo Amadeo (Frente Peronista) advirtió que "no estamos discutiendo política antimonopólica, lo que estamos discutiendo es el silencio a las ideas diferentes", y consideró que lo que pretendía el kirchnerismo es "declarar de interés público el libre pensamiento, que el pensamiento crítica sea objeto de control de parte del Estado".
Por el Frente Amplio Progresista (FAP), Ernesto Martínez (Fte. Cívico de Cba.) dijo, haciendo un juego de palabras, que se sancionaría "la ley innoble" y destacó que en su bloque "privilegiamos el valor democrático y constitucionalmente superior votando en contra el proyecto del oficialismo".
Papel prensado. Luego lo siguió Margarita Stolbizer (GEN), quien resaltó que "la declaración de interés público nunca puede ser usada con carácter restrictivo. El interés público es para que todos puedan y no para que algunos puedan".
Gabriela Michetti (PRO), alertó que "con esta votación vamos a tener un problema grave de expresión en la Argentina" y habló de la "segura confiscación de una empresa", en tanto que Patricia Bullrich (Unión por Todos), quien compartió el tiempo asignado al macrismo, sostuvo que es "mentira" que falte papel prensa para abastecer el mercado interno porque se sabe "que el mercado nacional está bien abastecido de papel prensa en la medida que puede ser importado a precios competitivos", explicó.
De la Coalición Cívica-ARI, Carlos Comi, coincidió con Bullrich en que "hoy no hay problemas objetivos para conseguir papel" y dijo que el papel importado es más barato que el nacional, informó DyN.
