El regulador antimonopolio alemán ha dado a Facebook Inc. 12 meses para cambiar su política de datos de usuarios y la forma en que combina estos datos, tras una investigación sin precedentes en Alemania que combinó la protección de datos y el cumplimiento de las normas de competencia.
La Oficina Federal de Cárteles de Alemania prohibió el jueves a la compañía de redes sociales que combinara datos de usuarios de varias fuentes, y dijo que su decisión devuelve el poder a los usuarios para "evitar que Facebook recopile y use sus datos sin ningún límite". Facebook rechazó la orden y dijo que apelará. La empresa considera que el mandato ataca a Facebook injustamente.
"La gente siempre pide romper las grandes compañías de internet", dijo Andreas Mundt, director de la Oficina Federal de Cárteles de Alemania, a los medios en Bonn. "Bueno, lo que hemos hecho aquí es algo así como separarlos internamente".
El mandato del jueves es el resultado de una investigación de tres años para analizar cómo Facebook recaba datos de los usuarios y determinar si utiliza ilícitamente su poder de mercado a fin de que los usuarios acepten entregar su información. No se ha impuesto ninguna multa. Se le ha dado doce meses a la empresa para acatar la sentencia.
Facebook dijo que la decisión "aplica mal la ley de competencia alemana para establecer diferentes reglas para una sola compañía". La compañía también acusó al regulador de socavar las reglas de protección de datos de la UE y subestimar "la feroz competencia a la que nos enfrentamos en Alemania".
Facebook cuenta con cerca de 30 millones de usuarios en Alemania, donde ha contratado a cientos de personas para eliminar noticias falsas, comentarios ilegales como negaciones del Holocausto y cuentas falsas.
La mayor economía de Europa ha sido un terreno difícil para las redes sociales después de que el Gobierno de la canciller Angela Merkel comenzase a aplicar la ley más estricta del continente el año pasado a fin de reducir el discurso de odio y las noticias falsas, amenazando con multar a empresas como Facebook. Twitter Inc. y YouTube, de Google, por hasta 50 millones de euros (US$57 millones) si no eliminan las publicaciones ilegales.
Facebook tiene cuatro meses para mostrar cómo acatará la decisión. El regulador dijo que puede imponer multas de hasta 10 millones de euros si la compañía no cumple.
La investigación alemana es una de las muchas a las que la empresa, con sede en Menlo Park, California, se enfrenta en Europa y Estados Unidos por la gestión de datos personales. El caso se centra en el aspecto fundamental para Facebook sobre cómo aumenta sus ingresos por publicidad. El regulador ha investigado la práctica de la red de recopilar datos sobre qué sitios web visitan los usuarios y fusionar la información con sus perfiles de Facebook. Esa información se vende a las empresas, lo que les permite adaptar los anuncios a los usuarios individuales.
En una conclusión preliminar de finales de 2017, la agencia dijo que la práctica viola los principios de protección de datos de la Unión Europea. Los usuarios no saben que están siendo vigilados incluso si no han iniciado la sesión en su cuenta de Facebook. Facebook utiliza ilícitamente su posición dominante para que las personas consientan sus políticas en lugar de darles opciones sobre cómo se recopilan los datos, dijo el regulador en aquel momento.
La agencia se basa en una regla desarrollada por el tribunal superior de Alemania que dice que una compañía dominante puede ser juzgada por uso indebido de su posición si obliga a usuarios a aceptar términos injustos.