Los Pumas cayeron nuevamente ante Inglaterra, esta vez por 35-25, en el Estadio Brigadier General Estanislao López, de Colón de Santa Fe. Siete días después de perder ante el mismo adversario en San Juan, el seleccionado argentino pagó caros sus propios errores ante un prolijo oponenete que capitalizó la mayoría de esas fallas.
El próximo sábado, en el cierre de la ventana internacional, el equipo argentino se medirá con Georgia en un partido que a priori se presume accesible y se desarrollará en San Salvador de Jujuy.
El encuentro de ayer tuvo un arranque favorable a los visitantes, que en su primera incursión en ofensiva llegaron al ingoal argentino. Una buena salida desde el line le permitió al segunda línea Ewels apoyar bajo los palos para que Ford convirtiera y pusiera el 7-0 británico. La respuesta puma llegó inmediatamente, igualando el marcador desde la misma salida y con una gran maniobra ofensiva que Joaquín Tuculet transformó en el try que luego Nicolás Sánchez convirtió sin dificultad.
Si bien Los Pumas pudieron ponerse en ventaja, los ingleses se recuperaron y volvieron a pasar al frente gracias a errores de los jugadores argentinos. De esta manera, cerraron el primer tiempo con un parcial de 18-13, sólo cinco puntos arriba.
En el segundo período, Los Pumas salieron con decisión a instalarse en campo inglés. Un errático Nico Sánchez, quien no estuvo fino como en otras ocasiones, le impidió a la Argentina irse al frente, dejando el marcador igualado en 18. Era el mejor momento albiceleste en el match, pero un grosero error de Jerónimo de la Fuente les permitió a los dirigidos por Jones recuperar la ventaja.
Los Pumas salieron nuevamente con decisión e inteligencia a remontar la historia. El wing Emiliano Bofelli anotó el tercer try del partido para la formación local. La conversión de Sánchez sirvió para emparejar una vez más el marcador en 25. Pero los los ingleses supieron sacarle máximo rédito al maul, una de sus formaciones favoritas, para ponerse otra vez al frente gracias al ingresado Will Collier. Llegando a los 33, y cuando el equipo argentino iba con lo último que le quedaba tratando de volver a empatar, George Ford, la figura de la serie, liquidó el pleito con un preciso drop.
El triunfo fue nuevamente para los británicos, que sin ser mucho más supieron capitalizar los errores albicelestes y se fueron invictos.