En medio de un clima de bajas expectativas de crecimiento para 2014, los empresarios de grandes y medianas consideran que la inflación y el devenir político nacional son las principales preocupaciones que afectan el clima de negocios.
Los datos surgen del último Sondeo de Expectativas de Líderes Corporativos (Selc) realizado por la División Finanzas Corporativas de BDO, que analizó las respuestas de 75 líderes empresarios que facturan unos $ 65 mil millones en total. El estudio, a cargo de Fernando Garabato, fue realizado en diciembre y describe un humor entre cauteloso pero pesimista en cuanto a la actividad económica. Según el relevamiento, para el 56% de los ejecutivos consultados no se crecerá más de 2%, mientras que el 26,7% considera que este año se vivirá una recesión y otro 2,7% entiende que podría darse un escenario de una retracción del PBI del 2%.
Pero en lo que se refiere a los principales problemas que sienten que deberán afrontar, la suba de precios se llevó el primer lugar. En un año en que las estimaciones privadas se encuentran entre el 35 y 40%, y antes de que se conozca el dato oficial (IPCNu) correspondiente a febrero que se anunciará mañana, el 69,3% de los empresarios encuestados considera que la inflación es el mayor factor de preocupación para el clima de negocios. El dato es significativo porque se pronunció antes de la devaluación y la aceleración de precios de enero y febrero.
En segundo lugar, los ejecutivos señalaron que el devenir político nacional también les merece una fuerte preocupación, con el 56% de las opiniones, mientras que los cambios regulatorios y los costos salariales se ubicaron en tercer lugar, con el 50,7%.
En correlato con la atención por la inflación, los empresarios señalaron que el mayor desafío para el año será afrontar el aumento de los costos, con el 32% de las opiniones. De acuerdo con los analistas de BDO, se trata de una preocupación que creció fuertemente (7,5 puntos porcentuales) con respecto al relevamiento realizado un año antes.
Los directivos señalaron además que otra de sus preocupaciones para este año corresponde al manejo del flujo de caja, mientras que la idea de avanzar con innovaciones en el negocio quedó muy relegada.
Tal como detalla el informe, la implementación de nuevos productos o servicios quedó en tercer lugar, marcando una drástica caída (-14,8 puntos porcentuales). Así, los empresarios anticipan que sus movimientos se acercarán más a sostener el esquema actual de negocios que a expandirse. En ese sentido, se explica que se mantuvo estable la importancia que los ejecutivos le dan a responder los desafíos de la competencia, que permaneció en el mismo nivel que el año previo, con el 9,3% de respuestas afirmativas.