El festival fue haciendo un recorrido y tiene un lugar dentro de la industria audiovisual argentina”. Así define Alejandra Marano, la directora ejecutiva de Construir Cine y de Construir TV, su Festival Internacional del Cine sobre Trabajo. No es fácil, claro, en un país donde hasta un festival como el Bafici no pudo llevarse a cabo online, una modalidad que gran parte del mundo del cine festivalero ha adquirido. Pero Construir lo ha logrado. No sin sus complicaciones, claro: “Estábamos todos debatiéndonos porque nuestro festival ocurre en la segunda semana de mayo, que es el mes del trabajo; y si bien todo está cambiado, no lo queríamos suspender. Pero también nos parecía raro retrasarlo: “Y así fue que trabajando junto a Octubre TV, y su plataforma (de la Fundación Octubre), se logró generar el festival de siempre pero con modificaciones: “La plataforma es de suscripción gratuita y durante la semana del festival, del 6 al 13 de mayo, todas las películas van a estar disponibles y las vas a poder ver cuando quieras”.
—¿Cuál fue la complicación más grande a la hora de volcar un festival de cine al online en Argentina?
—Lo más complicado fue la cuestión de derechos, porque eso nos hizo repensar un poco el festival: nosotros siempre elegimos las películas en términos de su temática, su calidad y, claro, el recorrido en otros festivales. Pero las películas tienen los miedos lógicos que genera su presencia online y por eso logramos asegurarnos una plataforma robusta, por ese miedo de la gente, muy lógico, a la piratería.
—¿Cómo ves el festival después de los años del trabajo hecho a nivel editorial?
—Creo que al final del día la programación nos deja muy contentos. Mario Durrieu es el director de programación, y yo le pedía menos películas, pensando que no íbamos a llegar. Y ahora tenemos más películas que antes. Nos fuimos a un lugar muy de autor, que nos encanta. Desde el año pasado, yo pedía historias más alegres, sobre todo ahora considerando esta situación. Lo discutimos mucho y seguí los consejos de Mario. Así logramos tener películas como Spoon, que es una maravilla, y se acopla al foco temático en el cambio climático.
—Además del foco temático en el cambio climático y sumar cortos argentinos en la programación, como parte de una gran presencia argentina, el estar online les permite una gran presencia federal.
—Tenemos películas de autor y de cine independiente que generalmente no llegan. Creo que de toda la desgracia uno siempre rescata algo. Siempre queríamos ir al interior. Pero la verdad es que, en términos de logística, no es tan fácil. Hemos hecho cosas en el Cabildo, pusimos el domo geostático en ediciones pasadas. Lo más cercano que tuvimos a algo federal fue nuestro acuerdo con las penitenciarías. Nos puso muy contentos pero no fue una federalización del festival. Ahora podemos empezar a trabajar con los festivales amigos, el Festival Audiovisual Bariloche y el Festival Internacional de Cine de las Alturas, por ejemplo. Hacer una cosa muy colaborativa. La premisa para llevar a cabo el festival este año es la colaboración: además de que esté disponible online, es crucial que la gente de Jujuy t de todo el país lo sepa.