La periodista política Nuria Am informó, para Modo Fontevecchia, por Net TV y Radio Perfil (FM 101.9), el perfil de los tres jueces que condenaron a Cristina Kirchner, este martes 6 de diciembre, en el marco de la Causa Vialidad.
Los tres jueces ya habían actuado en causas con impacto en la opinión pública, aunque ninguna con tanto impacto como ésta, por supuesto. Los tres jueces fueron elegidos por Cristina Kirchner, en su momento, de las propuestas enviadas por el Consejo de la Magistratura, que manejaba el kirchnerismo. La expresidenta firmó las designaciones de esos jueces y las envió al Senado para ser votadas.
Jorge Gorini
Tiene 54 años. Es el Presidente del Tribunal y, por lo tanto, a quien le tocó leer la condena a Cristina. Su carrera judicial comenzó como secretario de los Tribunales Penales ordinarios. Luego fue defensor oficial en la ciudad de Buenos Aires hasta que, en el año 2005, concursó por el cargo de juez penal en primera instancia y lo ganó, reemplazando al titular de un Tribunal Oral. Luego concursó por el cargo que hoy tiene, presidiendo el Tribunal Oral Federal N° 2.
Integró el Tribunal que absolvió a los imputados de haber provocado la tragedia aeronáutica de LAPA, la más importante de la historia argentina. Como hobbie, es entrenador de boxeo profesional.
Andrés Basso
Tiene 51 años. Comenzó su carrera en los Tribunales Federales de la ciudad de La Plata. Tuvo un corto paso por los tribunales de Lomas de Zamora, y de allí fue a los Tribunales Federales de Retiro.
Votó, en su momento, por la condena a los absueltos Cristóbal López y Fabián de Sousa en la causa Oil Combustibles. También en la del ex titular de la AFIP, Ricardo Echegaray, en el marco de la misma investigación.
En el segundo juicio por el atentado a la AMIA, apoyó con su voto la absolución de Carlos Telledín, dueño de la camioneta donde estaban los explosivos que volaron la mutual. Condenó a testigos falsos que dijeron haber visto al juez Sebastián Casanello en la Quinta de Olivos por haber mentido en su declaración judicial.
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Rodrigo Giménez Uriburu
Tiene 51 años. Entró a los tribunales como meritorio, sin cobrar un sueldo fijo, mientras estudiaba derecho en la Universidad Católica Argentina. Cinco años después se convirtió en relator del Tribunal Oral en Comodoro Py. Trabajó con el juez José Galeano durante el periodo de recopilación de datos para la elevación a juicio por el ataque a la sede de la AMIA.
Votó, en su momento, las condenas a Enrique Mathov, ex secretario de seguridad de La Alianza, y Enrique Santos, ex jefe de la policía, en la causa por las muertes del 20 de diciembre del año 2001.
Participó del juicio por la tragedia de Once. Dictó las condenas de Carlos Menem y Domingo Cavallo por la venta del predio de La Rural, y también a Felisa Miceli por la bolsa con dinero encontrada en el baño de su oficina.
Pedidos de recusación
Hubo dos recusaciones en el proceso de este juicio. Una contra Gorini, otra contra Giménez Uriburu.
La recusación contra el jefe del Tribunal se fundamentó en los encuentros que había mantenido Gorini con Patricia Bullrich, en el ministerio de Seguridad, durante la presidencia de Mauricio Macri. El magistrado había dicho que esos encuentros se debían a la privacidad de ciertos funcionarios públicos que estaban en medio de procesos judiciales, para mantener la privacidad ante la posibilidad de toma de imágenes por las cámaras de televisión.
En el caso de Giménez Uriburu, se basaba en el hecho de que el juez había concurrido a jugar partidos de fútbol a la quinta “Los Abrojos”, que pertenece al ex presidente Mauricio Macri. Giménez Uriburu afirmó que, cuando tomó esta causa, ya no participaba más de esas actividades deportivas.
A ninguno de los tres jueces se le conoce militancia política.
FM JL
