Todos los países y también nosotros afrontamos una grave amenaza sanitaria. Nuestras autoridades se vieron obligadas a interrumpir el dictado normal de clases. El propósito fue justificado, ya que se trataba de defender la vida de maestros, alumnos y sus familiares.
La interrupción del dictado de clases en la escuela llegó a afectar nada menos que a 177 naciones y más de 1.300 millones de alumnos. De hecho, tres de cuatro niños viven en países donde las escuelas han estado o siguen aún cerradas.
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Los problemas que este cierre ocasiona afectan a todas las comunidades. Pero las consecuencias son graves para los niños desfavorecidos y sus familias. Es importante evitar que se agraven aún más nuestras grandes diferencias educativas.
Por esta razón, se requiere establecer otras opciones, como la utilización inteligente de los medios de comunicación, muy difundidos entre todos los sectores de la población. En este punto, lamentablemente, debemos señalar que los avances han sido escasos en nuestro país.
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El confinamiento en casa perjudica más al rendimiento de los niños de las familias más humildes, que no tienen acceso a lugares apropiados para el estudio y carecen de elementos tecnológicos de apoyo, como los que tienen los alumnos de familias con más recursos económicos. Debemos evitar que esta pandemia agrave todavía más la creciente desigualdad emergente de esta vinculación.
En muchos países, ha sido necesario implementar innovaciones en el aprendizaje remoto a gran escala. Para llegar a la mayor cantidad posible de niños y jóvenes, se aplicaron enfoques de aprendizaje a distancia multimodal, que combinan recursos virtuales con material de radio, televisión y telefonía móvil, así como impreso, para los más vulnerables.
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Si bien no existe un único camino para abordar el aprendizaje en el futuro, los sistemas de buen rendimiento llevan a cabo reformas sistémicas respaldadas por un compromiso político y un enfoque que involucre a todo el gobierno y se centre en la necesidad de que todos los niños aprendan. Es crucial hacer constante hincapié en la equidad y la inclusión.
* Alieto Guadagni, director del Centro de Estudios de la Educación Argentina de la Universidad de Belgrano.
