La ex secretaria insiste: Uberti me pidió que ubicara el teléfono de Antonini Wilson
Así declaró Victoria Bereziuk, ex secretaria de Claudio Uberti y pasajera en el vuelo de la valija
. Las claves de la relación con el empresario chavista.
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Cedoc
Guido Alejandro Antonini Wilson, el empresario venezolano-estadounidense que intentó ingresar ilegalmente al país una valija con 800.000 dólares, habría estado en las oficinas del Órgano de Control de Concesiones Viales (Occovi) dos meses antes de que estallara el escándalo.
A este dato se le agrega otro: la agenda que manejaba Claudio Uberti durante su paso como director de ese organismo sería una de las claves para determinar la relación del ex funcionario con el valijero.
Uberti, el único funcionario de la gestión de Néstor Kirchner imputado en la causa conocida como Valijagate, había presentado el pasado 1º de febrero en la Justicia un escrito de 23 carillas dondeseguraba que no tenía ninguna relación con Antonini. Aunque aclaró que lo había conocido en Caracas durante un almuerzo, un día antes de viajar desde esa ciudad a Buenos Aires. Vuelo que compartió con el supuesto dueño de la valija y con Daniel Uzcátegui Specht, hijo de Diego Uzcátegui Matheus, en aquel momento el vicepresidente de PDVSA.
Los elementos de prueba que se secuestraron durante el allanamiento que se realizó en las oficinas del Occovi, a pedido de la fiscal en lo Penal y Económico María Luz Rivas Diez, servirían también para establecer la relación que tenía Uberti con distintos funcionarios de la poderosa petrolera PDVSA.
La asistente de Uberti, Victoria Bereziuk, reconoció durante su declaración testimonial que había conocido a Antonini dos meses antes del viaje. Fue cuando el empresario chavista intentó gestionar una frustrada audiencia con Uberti. Otras versiones indican que habría existido más de un contacto entre el valijero y el ex funcionario.
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Bereziuk, que también participó del vuelo contratado por la estatal Enarsa que traía la valija de los 800.000 dólares, también contó que ella había servido de “puente” entre las comunicaciones que mantuvo –después del escándalo– su jefe con Antonini.
