La constructora Odebrecht ya tiene abogados en la Argentina para poner en marcha su proceso de colaboración con la Justicia. La empresa brasileña investigada por el pago de US$ 35 millones en sobornos a funcionarios argentinos contrató a uno de los estudios jurídicos más importantes del país: M&M Bomchil y abogados. Así lo confirmaron a PERFIL fuentes ligadas a la empresa y a los tribunales. El caso ya salpica tanto a los kircneristas Ricardo Jaime y Julio De Vido, como al primo del presidente Mauricio Macri, el empresario Angelo Calcaterra, socio de la brasileña, y al jefe de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI), Gustavo Arribas.
En Brasil, la compañía se comprometió con los fiscales del Lava Jato a aportar información y pruebas para que la Justicia argentina avance contra los funcionarios que recibieron coimas de la constructora entre 2008 y 2014. Si no lo hace, a partir del 1º de junio serán los fiscales quienes entreguen la evidencia a sus pares en Argentina. En los tribunales, hay varias causas abiertas, inlcuida una investigación del fical Sergio Rodríguez sobre el capítulo argentino del Lava Jato.
El estudio argentino, que representa a algunas de las empresas más fuertes en el país, será uno de los representantes de Odebrecht en esa negociación, en la que la empresa busca bajar las penas de los ejecutivos que participaron de los sobornos y seguir operando en el país. Para eso, cuentan ya con la asesoría de uno de los socios del bufete, el abogado Guido Santiago Tawil, experto en litigios y arbitrajes internacionales ante el Ciadi. También se mueve como pez en el agua en las áreas de derecho administrativo y regulación económica. Es uno de los abogados que representa a empresas privatizadas desde los 90.
Odebrecht tiene un objetivo central: poder seguir operando en obra pública. La obsesión de Marcelo Odebrecht en la Argentina es el soterramiento del ferrocarril Sarmiento, la megaobra que comparte con Iecsa, de Calcaterra. El gobierno de Macri desembolsó $ 45 mil millones del Tesoro para una empresa sospechada de haber ganado la licitación mediante el pago de sobornos en 2010. Por eso, los intereses de Odebrecht siguen directamente ligados al kirchnerismo y macrismo.
Perfil. El abogado Tawil es también un académico. Fue secretario letrado de la Corte Suprema a fines de los 80 y principios de los 90; y director de la Comisión Nacional de Valores hasta 1993. Cultiva el perfil bajo “porque se lo debe a sus clientes y porque le aporta seriedad a su trabajo”, según se consignó en una de las pocas entrevistas que circulan en la web. “Litigo bastante, pero no me gusta el conflicto ni el pleito. Cuando litigo me gusta enfrentarme con buenos abogados donde se debatan temas técnicamente importantes. Por ejemplo, me gustan mucho los abogados ingleses, que litigan con humor, con ironía e inteligencia”, dijo en esa oportunidad a Iprofesional. Tiene otra frase de cabecera: “Si se quieren fomentar las inversiones, hay que asegurar primero que va a haber seguridad jurídica”.
En 2014, el entonces titular de la AFIP, Ricardo Echegaray, le apuntó a Alejandro Tawil, hermano del abogado, por el caso de las cuentas del HSBC en Suiza. El organismo, bajo la dirección del ex funcionario kirchnerista, había sostenido en los medios que su hermano “manejó cuentas de argentinos, como las de la familia Rodríguez Larreta”, hoy jefe de Gobierno porteño.