La pericia toxicológica realizada al cuerpo de Chiara Páez, la joven asesinada y enterrada en el patio de la casa de su novio, en la localidad santafesina de Rufino, reveló que fue forzada a ingerir medicamentos que son utilizados con fines abortivos.
"Se ha determinado que a la menor le habían suministrado la droga Oxaprost, que es utilizada habitualmente con fines abortivos", sostuvo el fiscal Juan Pablo Lavini Rosset.
El funcionario judicial, a cargo de una causa paralela que investiga al entorno familiar del novio de la víctima moral, expresó que "se secuestró también una receta firmada por un médico de Rufino y constatamos que el medicamento fue comprado en una farmacia de la ciudad", consigna la agencia de noticias Dyn.
En el expediente figura que la madre del joven que admitió el asesinato, Carolina Vallejos, de 34 años, pagó 1.250 pesos por la adquisición de pastillas abortivas.
Los investigadores intentan determinar si el novio de la adolescente, junto con su su progenitora y su padrastro, imputados por los delitos de homicidio agravado por el vínculo y por femicidio, obligaron a tomar ese fármaco a Chiara, quien según la autopsia al ser asesinada cursaba un embarazo reciente.
El cadáver de la adolescente fue encontrado en la noche del 11 de mayo, enterrado en el fondo de la casa del novio, ubicada en calle San Martín al 800, en el Barrio Jardín de Rufino, donde funciona una herrería. Ante el hecho, hubo una masiva marcha en esa localidad para exigir justicia.