Multitudinario funeral del cazador de cocodrilos

Como si se tratara de la final de un torneo deportivo internacional, las calles de Australia se plagaron de pantallas gigantes para que miles de personas pudieran seguir en detalle el funeral de uno de sus ídolos, el Cazador de cocodrilos, Steve Irwin.

Irwin murió hace más de dos semanas debido a la picadura de una rata de aguijón mientras buceaba.

Las 3.000 entradas para presenciar el funeral se agotaron ayer en 17 minutos. Para conseguirlas, los interesados debieron hacer una donación a la organización para la naturaleza Wildife Warriors, creada por Irwin. Esas personas, más otras 2000 colmaron el zoológico familiar del cazador de cocodrilos en el estado de Queensland.

También se hizo presente el primer ministro australiano, John Howard, quien expresó que el funeral “ es una celebración de la fantástica vida que vivió Irwin” y que su muerte “ha a afectado a todos con la mayor tristeza”.

Para no ser menos, también pasaron por el zoológico el líder de la oposición laborista, Kim Beazley y un largo listado de famosos que incluye al campeón de motociclismo Mick Doohan y el campeón de boxeo Kostya Tszyu.

Otros, estuvieron presentes de manera simbólica. Es que la viuda de Irwin, Terri pidió que las ofrendas que fueron dejadas por los fanáticos en las puertas del zoológico desde que su marido murió, sean llevadas al interior para que los que no pudieron acceder al funeral estén ahí, de algún modo.

Terri llegó al zoológico acompañada de sus dos hijos y, a su lado, quedó una silla vacía, como símbolo de la ausencia que ha dejado tras su muerte el polémico cazador televisivo.

Además de los 5000 espectadores presenciales y de los miles de australianos que pudieron seguir las instancias del funeral a través de pantallas gigantes, unos 300 millones de espectadores en todo el mundo podrán apreciar las imágenes por televisión.