En África puede que se haya detectado solo uno de cada cien casos de covid-19 y cerca de dos tercios de los habitantes del continente pueden haber sido infectados con la enfermedad, dijo la Organización Mundial de la Salud (OMS).
La evaluación, basada en 150 estudios publicados en 2020 y 2021, muestra cuán subestimado puede haber sido el impacto de la enfermedad en el continente más pobre del mundo. A nivel mundial, uno de cada 16 casos se ha detectado en promedio, según la OMS.
“En septiembre de 2021, en lugar de los 8,2 millones de casos informados, de hecho hubo 800 millones de infecciones”, dijo Matshidiso Moeti, director de la OMS para África, en una conferencia telefónica el jueves. “Esto destaca la necesidad de niveles sostenidos de pruebas y vigilancia de rutina en el futuro, si esperamos estar un paso por delante de la pandemia”.
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África, que inicialmente no pudo obtener vacunas adecuadas y ahora está luchando por administrarlas, es el continente menos vacunado del mundo y solo el 16% de las personas en el continente han recibido un ciclo completo de vacunas.
Los débiles sistemas de salud y la falta de vigilancia han hecho que solo se hayan registrado un cuarto de millón de muertes como consecuencia de la enfermedad. Eso ha avivado la especulación, descartada por la mayoría de los científicos, de que los africanos son menos susceptibles al covid-19.
La evidencia anecdótica ha demostrado que los hospitales desde Lagos hasta Dar es Salaam y Harare están inundados de pacientes que presentan síntomas de covid-19 en medio de oleadas de infección. El exceso de muertes, visto como una medida más precisa del impacto de covid-19, solo en Sudáfrica supera las 300.000.
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La proporción de africanos infectados con la enfermedad aumentó del 3% en junio de 2020 al 65% en septiembre del año pasado, dijo.
Las medidas de protección social, como el uso de mascarillas y los límites a las reuniones, se están relajando en todo el continente y esto puede conducir a más infecciones, dijo.
“Nuestro análisis es una clara evidencia de la continua y significativa circulación del virus covid-19 entre las personas del continente”, dijo Moeti. “Con esto viene un mayor riesgo de variantes más letales que pueden aplastar la inmunidad existente. Así que la vacunación sigue siendo nuestra mejor defensa”.
