En las dos semanas que le restan para volver a Balcarce 50, la ex presidenta y actual vicepresidenta electa Cristina Kirchner tiene una nutrida agenda judicial por algunas de las distintas causas que la involucran. Con diez procesamientos en su haber y un juicio en pleno curso, su defensa buscará aliviar esta semana su complicada situación en la causa de los “cuadernos de las coimas”. Será en una audiencia ante la Cámara de Casación Federal a la que llegaron con la apelación de su procesamiento en el caso, en el que está acusada de haber sido la jefa de una asociación ilícita que operó en el país, en torno de la obra pública, entre 2003 y 2015. Por otro lado, todo indica que el lunes 2 será su turno en indagatoria en el marco del juicio por el presunto direccionamiento de la obra pública en Santa Cruz, en favor de Lázaro Báez, el primer debate que la tiene en el banquillo de los acusados.
En la Cámara de Casación se tratará la apelación de Cristina a su procesamiento, su prisión preventiva y pedido de desafuero pedido por el juez del caso de los cuadernos, Claudio Bonadio.
Pero no son los únicos puntos que buscará revertir su defensa. La aplicación de la ley del arrepentido –una de las claves que permitió el avance de la investigación en tiempo récord y que es el principal punto de cuestionamientos por parte de los defensores de los involucrados– y el fórum shopping por el que la causa le tocó a Bonadio sin sorteo, serán los otros ejes en los que se hará hincapié en pos de mejorar su situación.
La audiencia de esta semana será la primera de la defensa de la ex mandataria en Casación, el máximo tribunal penal del país. Inicialmente prevista para la primera semana de noviembre, fue prorrogada por pedido de la defensa.
En el caso deberán decidir los camaristas que tienen el expediente en su Sala, Daniel Petrone, Diego Barroetaveña y Ana María Figueroa. La resolución no será inmediata, pero se estima que podría conocerse antes de la feria de verano.
Por otro lado, el próximo lunes 2 podría concretarse la indagatoria de la ex mandataria en el juicio de obra pública, el primero que, desde el 21 de mayo pasado, la tiene en el banquillo de los acusados. En ese caso, la vicepresidenta electa está acusada de haber integrado la asociación ilícita que defraudó al Estado al direccionar la obra pública en Santa Cruz en favor de Lázaro Báez. Precisamente, el empresario declarará en el caso mañana –cuando finalice Juan Carlos Villafañe, ex presidente de la Administración General de Vialidad de Santa Cruz– apenas cinco días después de haber leído un texto en su indagatoria en el juicio por la denominada “Ruta del dinero K”.
Con su presentación una semana antes de asumir, la ex presidenta cerrará la ronda de indagatorias del caso, donde hay 13 acusados en total. Luego se abriría la etapa de declaraciones testimoniales.
