Carrió negocia con la UCR que denostaba en campaña

La Coalición Cívica liderada por Elisa Carrió, que atraviesa una etapa de reestructuración tras el segundo lugar logrado en las elecciones, sigue batallando por consolidarse como la principal fuerza opositora al kirchnerismo, pero la tarea le está sacando canas verdes a "Lilita", que mientras negocia con laUCR, tiene que atender (y conjurar) los ásperos cuestionamientos que le surgen puertas adentro desde el mismo ARI.

A una semana de transcurridas las elecciones, el escenario de la fuerza de Carrió se recalentó  hoy luego de las duras declaraciones de la diputada del ARI María América González, que llegó a acusar de "corrupción" a las autoridades de la Coalición. Pero no fue la única voz crítica que debió escuchar Carrió, ya que hubo otros cuestionamientos de legisladores aristas.

Por estas horas, y luego de denostrala en la campaña electoral, la CC protagonizó un (forzado) acercamiento al Radicalismo porteño y recibió una señal favorable del titular de la UCR nacional, Gerardo Morales, otra figura política en problemas, quien le propuso a Lilita encarar una "oposición articulada" para generar "proyectos en común que aporten al crecimiento del país".

La situación de Morales no es cómoda: Julio Cobos quiere avanzar sobre la UCR nacional y apunta a la cabeza del compañero de formula de Lavagna, acusándolo de ser el responsable de la pobre performance electoral nacional del radicalismo, que venía además de perder en el Chaco. "La CC debiera hacer algún esfuerzo por resolver sus cuestiones ideológicas y tratar de que podamos conformar una mesa ampliada para hacerle frente al Gobierno", sostuvo Morales, que ve en el acuerdo con Lilita un salvavidas para su propio equilibrio en la UCR.

El senador reveló un diálogo que mantuvo con el titular del Partido Socialista, Rubén Giustiniani, donde acordó "tener una reunión esta semana". Sin embargo, Morales pidió no hacer "lo del Gobierno: no terminemos cooptándonos gente entre nosotros, porque es muy malo". Morales se refirió de esa manera a la idea de Carrió de sumar a los dirigentes radicales Víctor Fayad (intendente electo de Mendoza), Mario Negri (titular de la UCR de Córdoba) y Ricardo Gil Lavedra (ex postulante a senador porteño).

Justamente, el radicalismo porteño inició hoy "un diálogo institucional" con la líder de la CC, en el marco de "una modernización de la UCR" de la Capital Federal. Sobre esta cuestión, el presidente de la UCR porteña, Carlos Más Vélez, señaló que la fuerza "está dispuesto a conversar con todos aquellas fuerzas con quienes pueda compartir eventualmente objetivos y sensaciones sobre la realidad política nacional y local".

Desde la CC, el legislador Enrique Olivera -notorio ex radical- destacó que la fuerza de Carrió "permite hacer un acuerdo sin perder la identidad" de cada partido. "Desde hace tiempo que se busca una renovación de dirigentes de la UCR de la Ciudad y ahora aumentan las posibilidades de que eso ocurra desde la CC", sostuvo Olivera, en diálogo con DyN.

La contracara del acercamiento de la Coalición hacia la UCR surgió desde el interior del ARI. La diputada del ARI María América González rechazó sumarse a la Coalición y denunció que la alianza de Carrió intenta disciplinarlos "ofreciendo puestos, en la peor práctica de corrupción que siempre tratamos de combatir".

González, ex compañera de fórmula de Claudio Lozano en las pasadas elecciones a jefe de Gobierno porteño, calificó a la CC de "engendro de derechísima" y reivindicó su propósito y el de otros de sus pares de bancada -como Eduardo Macaluse y Carlos Raimundi- de "permanecer como miembros del bloque del ARI".

En duros términos, apuntó: "Yo no me puedo mezclar con una persona de la Coalición como es Patricia Bullrich (diputada electa) , que fue ministra de Trabajo de la Alianza y descontó el 13 por ciento a todos los trabajadores y jubilados".

A su vez, el titular del bloque de Diputados del ARI, Eduardo Macaluse, advirtió el "riesgo del "rumbo del partido" por "los anuncios de decisiones de la CC no consultadas", y admitió una "fuerte tensión interna".

"Queremos conversar el rumbo de nuestra práctica política y el método de procesamiento porque no aceptamos órdenes", sentenció a DyN Macaluse en directa alusión a Carrió, respaldado por los legisladores Marta Maffei, Delia Bisutti, Leonardo Gorbacz, entre otros. En ese sentido, el diputado exigió un "profundo debate" y expresó su preocupación por las críticas tanto del presidente Néstor Kirchner y Carrió que "dividen a la sociedad".

Por su parte, el presidente del ARI bonaerense, Carlos Raimundi, anunció que conformará un espacio alternativo en el Congreso por no sentirse "representado" por la CC. En declaraciones a Radio América, el diputado apuntó contra la fundadora del ARI al sostener que pretende "hacer un planteo de dividir artificialmente a la sociedad y hacer una suerte de continuidad de la campaña electoral, después de un resultado tan claro".

Ante esta serie de cuestionamientos, la secretaria general del ARI, Elsa Quiroz, salió al cruce y consideró "repudiable" la "metodología de discutir por fuera de las instancias orgánicas". "Todavía estamos celebrando el resultado de las elecciones, por eso hay que ser inteligentes y no prestarse a ningún tipo de juegos", agregó. El gobierno, mientras tanto, se divierte con las penurias de Lilita para convertirse en "jefa indiscutida de la oposición". Se divierte especialmente con lo de "indiscutida"...