El jueves de la semana pasada el jefe de la Policía de la Provincia de Buenos Aires, Fabián Perroni, fue cuestionado tras afirmar que la pobreza y la exclusión extrema son dos factores que impulsan a muchas personas a cometer delitos.
"La violencia permanente de los delincuentes es producto de la droga, pero también hay una situación social que hace que la persona que tenga la necesidad de comer delinca, lo que hace que el delito más simple aumente", opinó Perroni en diálogo con radio La Red.
Ayer, el jefe de la Policía Federal, Néstor Roncaglia, volvió a abrir la polémica al indicar que comparte parte de los dichos de su par de la Bonaerense. "Coincido en parte (con Perroni), puede ser una de las causales", sostuvo en declaraciones al programa Debo decir de Luis Novaresio que se emite por el canal América.
Sin embargo, el titular de la fuerza federal aclaró que "en alguna medida puede incidir la necesidad, pero el que tiene hambre a lo mejor roba un supermercado, no a una persona y le saca su dinero y ese dinero es invertido en disfrute personal de esos delincuentes".
En ese sentido, pidió "no estigmatizar a los pobres. Si no, el pobre es un delincuente". Sobre los motivos que habrían llevado a Perroni a emitir esas declaraciones la semana pasada, estimó: "Al ser detenidos, los delincuentes siempre dan justificativos, muchas veces es ´no tengo trabajo´".