El secretario de Estado del Vaticano, cardenal Tarcisio Bertone, abogó hoy, ante el vicepresidente Daniel Scioli, para que se "resuelvan los problemas abiertos" con Argentina y expresó que la Iglesia "implora la bendición de Dios" para la presidenta electa Cristina Fernández de Kirchner.
Bertone, quien llegó ayer al país para encabezar mañana la beatificación de Ceferino Namuncurá en Chimpay, fue recibido esta mañana por Scioli en el salón Azul del Senado, en un encuentro protocolar pero muy cordial, en el que se intercambiaron señales de acercamiento entre el gobierno y la iglesia.
Durante la reunión, Bertone le transmitió un saludo del Papa Benedicto XVI, quien -aseguró- "hace votos para el progreso material y moral de la Argentina", instó a que "el gobierno y los obispos trabajen para el desarrollo del país" y comprometió para ello la colaboración de la Santa Sede.
En el marco de un diálogo distendido, el virtual número dos del Vaticano se refirió al mensaje que el titular del Episcopado, cardenal Jorge Bergoglio, le envió a la Presidenta electa para saludarla por su triunfo.
"Sé que la Conferencia Episcopal intenta el diálogo, y que ha enviado un mensaje para la nueva Presidenta", dijo el purpurado vaticano, y aseveró que la Iglesia "implora la bendición de Dios" para el nuevo período de gobierno que se inicia el 10 de diciembre.
Scioli dijo que el gobierno nacional "recibió con beneplácito el mensaje del Episcopado y esperamos su colaboración" y recordó que Cristina Fernández de Kirchner hizo "una convocatoria muy amplia a la concertación, a unir esfuerzos, poner el acento en las coincidencias y poder cuidar esta recuperación para proyectarla a un mejor futuro para todos".
En ese marco, el cardenal instó a que "se resuelvan los problemas abiertos, con la colaboración de todos, y también con la del gobernador (electo) de Buenos Aires", en referencia al nuevo destino de Scioli después del 10 de diciembre.
El gobierno argentino aún tiene pendiente de solución con el Vaticano la designación del sucesor del ex obispo castrense Antonio Baseotto, a quien el Ejecutivo le quitó el rango de subsecretario y el sueldo en febrero de 2005.
El conflicto se originó a raíz de una carta que el obispo le envió al ministro de Salud, Ginés González García, en la que lo criticaba por promover el reparto de preservativos entre los jóvenes y por estar a favor de despenalizar el aborto.
En esa carta, el prelado utilizó la frase bíblica que indica "que aquellos que escandalicen a los más pequeños, mas vale que se les cuelgue una piedra al cuello y los tiren al mar", lo que fue interpretado por el gobierno como una alusión a los "vuelos de la muerte" que se realizaban durante la dictadura militar.
Bertone será recibido el próximo miércoles en Casa de Gobierno por el presidente Néstor Kirchner y la mandataria electa.
Scioli optimista. Durante la reunión de hoy, Scioli le dio datos a Bertone de la recuperación económica del país, durante la gestión de Kirchner, y la baja en los índices de desocupación y pobreza.
"Estamos trabajando para reconstruir el tejido social y fortalecer esa institución básica de la sociedad que es la familia, así como poner al trabajo en el corazón de nuestras políticas sociales", expresó.
En el encuentro también se refirieron al diálogo interreligioso que existe en Argentina, los jóvenes, la lucha contra la droga, e incluso el trabajo de la prensa. "Encomiendo a los periodistas que ayuden a la formación de los jóvenes y den mensajes postivos", les dijo Bertone a los trabajadores de prensa que cubrían el evento.
También participaron del encuentro el nuncio apostólico, monseñor Adriano Bernardini; el secretario de Culto, Guillermo Oliveri; el embajador argentino en El Vaticano, Carlos Custer, y el secretario privado de Bertone, Lech Priechota.
Al término del encuentro, Scioli le regaló un poncho al enviado del Vaticano, quien -a su vez- le entregó una medalla papal y un libro con reproducciones de Rafael.Fuente: Télam