La empresa que construyó el Metrobus Sur reconoció que el gobierno porteño le pagó por la obra más de un millón de pesos de más, porque calculaba que se habían hecho nueve paradores que al final no se construyeron. La información, llamativamente, recién salió a la luz cuando la Auditoría de la Ciudad comenzó a investigar el caso y calculó que el sobreprecio era de hasta $ 15 millones.
El informe preliminar de la Auditoría, que se aprobaría recién en agosto, también sostiene que tanto ese Metrobus como el de la Av. 9 de Julio costaron entre dos y tres veces más de lo que dice el gobierno, considerando las obras complementarias que requirieron su construcción.
“Se licitó con un precio, se terminó pagando bastante más de lo que efectivamente se hizo y después se presentó una redeterminación de precios cuando la Auditoría hizo señalamientos”, indicó Eduardo Epszteyn, representante del Frente para la Victoria en el organismo. “Después de saber que había un informe que mostraba importantes irregularidades en la certificación de lo ejecutado, la empresa presenta una liquidación final, recién dos años después, reconociendo que el gobierno le pagó de más”, coincide Facundo del Gaiso, auditor de la Coalición Cívica.
El Metrobus Sur (corre por avenida Sáenz) se inauguró en agosto de 2013. En septiembre el gobierno aprobó la recepción provisoria de la obra y en abril de 2014, la definitiva. En julio, la empresa Bricons SA presentó una liquidación final por $ 151,7 millones. En ese momento, la Subsecretaría de Transporte, que lidera Guillermo Dietrich, no había señalado ninguna inconsistencia. Pero en la Auditoría descubrieron que se habían hecho nueve paradas y 130 columnas menos, por lo que calcularon que se estaban pagando unos $ 15 millones de más. Recién en abril de este año la empresa envió su balance final de economías y demasías y reconoció los paradores y las columnas faltantes.
La dependencia de Dietrich justificó la diferencia alegando que cuando la investigación estaba en curso no se había hecho aún la liquidación final. “Respondimos el pedido de la Auditoría y ahora ellos deberán tratar y evaluar la información. Es importante aclarar que aún no trataron nuestras respuestas razón por la que no hay un informe final”, explicaron voceros de esa cartera.
“Hay que analizar si existe malversación de fondos, seguro hay desprolijidades”, expresó Epszteyn, quien asegura que los auditores del PRO “están haciendo todo lo posible para que el informe no salga antes de las elecciones”. Del Gaiso dijo que “el Metrobus Sur comienza en el autódromo y debería agregársele la parada Tribunales”.
El informe hace foco en el presupuesto final de las obras. Al defenderlo, el gobierno repite que el Metrobus es barato. El del Sur dice que salió $ 150 millones, y el de la 9 de Julio, $ 220 millones. Para la Auditoría, habría que sumar las obras complementarias (asfalto, espacios verdes, por ejemplo), por lo que el costo final asciende a $ 245 millones y $ 427 millones respectivamente.