Chile avanzó de forma masiva en la vacunación de su población contra el coronavirus, cerca de un 17,6 por ciento de su población ya ha recibido al menos una dosis. De completarse en tiempo y forma los planes de vacunación establecidos, el país tras las sierras espera lograr la vacunación del 23 por ciento de sus habitantes para el mes de junio.
En comunicación con RePerfilAr, la profesor de epidemiología de la Universidad de Chile, Gabriel Cavada explicó que según los últimos dichos del presidente Sebastián Piñera, "las negociaciones para obtener vacunas comenzaron entre finales de abril y principios de mayo de 2020", con los laboratorios que según el especialista, "ya se sabía que iban a tener éxito en producir vacunas".
En este sentido, Cavada pudo detallar que la cantidad de vacunas negociadas por el país sería de, "40 millones, el doble de lo que necesita la población chilena", ya que recordó que el país solo alberga a “15 millones de personas”.
A raíz de este acuerdo es evidente que Chile tendrá un remanente de vacunas, Cavada explicó que según los dichos de funcionarios chilenos el país, "va a colaborar inicialmente con los países del sur del continente que tengan falta de vacunas".
"Las negociaciones para obtener vacunas comenzaron entre finales de abril y principios de mayo de 2020"
Analizando la posición de la cantidad de casos que posee el vecino país, el epidemiólogo afirmó que "la gran apuesta gubernamental fue efectivamente ir por las vacuna", porque las medidas de epidemiología y salud pública en Chile, "nunca dieron resultados tremendamente efectivos", y aclaró que a finales de febrero "salimos de una segunda ola que era totalmente inesperada, que se encuentra en descenso".
Sin embargo, el especialista admitió que el aumento de casos "continúa recrudeciendo" y que se espera que para finales de marzo "resurja un rebrote un rebrote más o menos importante". Actualmente, Chile posee un reporte de entre 4 mil y 4.500 casos diarios, que confirmado por Cavada "es mucho", aunque al estar vacunados la mayoría de las personas mayores se espera que "en unos 30 o 45 días el sistema hospitalario se desestrese", generando una "reducción muy importante de muertes", pero no así de contagios.