Hay muchos estilos decorativos, pero varían según el diseño del barco, el tamaño y su puerto base (condicionado por el clima), pero si usas mis ¨tips¨, no te puedes equivocar.
Un proyecto que recién terminé fue decorar un yate para un cliente en las Bahamas. A diferencia de una casa o un apartamento, el espacio en los barcos es muy limitado, por ello tienes que hacer valer cada centímetro cuadrado y encontrar un equilibrio entre la belleza y la funcionalidad.
• Planificación del espacio – Los barcos vienen con una tipología predeterminada, pero a veces se pueden hacer modificaciones según tu estilo de vida. Asegúrate que tenga suficiente lugar para guardar las provisiones porque normalmente el espacio en las heladeras a bordo es escaso. El otro punto esencial son los placares para guardar desde la vajilla hasta tu ropa.
• Interiores monocromáticos – Evocan una sensación muy tranquila y relajante. Usar paletas de colores que combinan bien con el diseño interior del barco. El azul, marrón, blanco, beige o crema son los más seguros. Tratar de no usar colores fuertes ya que distraen y estimulan en un lugar de paz. El secreto de lograr un estilo monocromo cálido es hacer capas de tonos, tejidos, distintos materiales, estampados y texturas. La combinación da un acabado acogedor y fresco.
• Sorprender con el color, pero solo en accesorios y acentos decorativos – Decoración de la mesa es crucial para entretener a bordo y es una excelente oportunidad para incorporar un toque de color más llamativo como coral o turquesa. Para el exterior se puede jugar con almohadones decorativos con rayas azules ya que el color crea la profundidad y el drama. Usar toallas de playa estampadas en ¨ocean-inspired¨ motivos para el color inesperado.
• Un barco no es sinónimo de una casa o un departamento – La decoración debería ser sobria y práctica. Sugiero incorporar telas para el exterior, bien resistentes al sol y agua. El espacio interior también suele mojarse. Integrar solo muebles para la navegación y no usar los que tendrías en tu casa o patio, ya que desentonan mucho con el estilo náutico. Una silla estilo ¨director´s chair¨ en un color neutro nunca falla.
• Sofisticación sutil y minimalista – Menos es más en un barco. Sugiero integrar el interior con el exterior. No hacen falta muchos objetos de decoración ya que basta solo con mirar afuera e incorporar la ambientación elaborada por la naturaleza que entra por las ventanas. Es como tener un cuadro de Monet.
Ania Agárdy
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