SALUD
Ciencia

“Se podrá recuperar a pacientes en estados similares al coma”

Daniel Herrera, director del Laboratorio de Reparación Cerebral de la Universidad de Cornell, explica por qué algunos pacientes despiertan de estados de inconsciencia similares al coma.

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Daniel Herrera, año 2005. | Enrique Abbate

—¿De qué se trata su trabajo con pacientes en coma?

—Además del coma existe el estado vegetativo persistente (EVP): los pacientes parecen despertarse y dormir, aunque no interactúan. En el Congreso presenté un caso publicado en la revista Neurology, donde se vio que ciertos pacientes tienen interacciones fluctuantes con el medio ambiente. Antes, la explicación era que se trataba de un reflejo; ahora podemos hacer neuroimágenes y ver qué partes del cerebro se activan.

—¿Podría contar cómo es el caso de “Neurology”?

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—Un paciente que, cuando la hermana le contaba una historia de su infancia, lloraba. Pero no respondía a ninguna otra cosa. Con resonancia magnética funcional se determinó que el chico estaba en estado mínimo de conciencia (EMC): cuando se le leía la historia de la hermana, el lóbulo temporal derecho se activaba igual que el de una persona normal.

—¿Es un caso “raro”?

—Se comprobó con diferentes pacientes, en diferentes funciones, que distintos circuitos neuronales están preservados y, por lo tanto, también ciertas funciones cognitivas. Esto pasa en EMC. Así, quise ver en ratas qué se obtiene si se estimulan los núcleos intralaminares del tálamo, que funcionan como un marcapasos del cerebro para asociar todas las áreas entre sí. Y vi que aumenta la capacidad cognitiva.

Herrera: "Queremos ver si funciona en aquellas personas en las que ya no hay esperanzas"

—¿Cuál es el objetivo?

—Reclutar nuevas redes neurales. El cerebro posee muchas redes redundantes. O sea, el lenguaje no funciona en una zona específica del cerebro sino que funciona en esa zona asociada con otra y con otra; incluso, se comunica con el otro hemisferio. La idea es suplir la función de lo que está dañado. En forma preliminar, podemos decir que, así como a corto plazo vemos un aumento de la capacidad cognitiva, es posible que a largo plazo haya un cambio en la anatomía del cerebro gracias a esta estimulación.

Herrera: "La idea es suplir la función de lo que está dañado"

—¿Se podría recuperar una persona del estado mínimo de conciencia?

—Exacto. En el momento en el que ocurre un accidente cerebrovascular, por ejemplo, hay muchas zonas que no funcionan. Pero con estimulación se pueden “despertar” ciertos circuitos. Muchos de los casos concebidos como comatosos podrían tener mayores esperanzas.

—¿Es una idea futurista o una posibilidad cercana?

—Es una posibilidad concreta. Se podría lograr en cinco años, o incluso antes.

—¿Es frecuente el EMC?

—Mucho más de lo que se cree. En el mundo se producen por año 10 millones de traumatismos cerebrales (que pueden tener consecuencias). El 2% de la población estadounidense sufrió un traumatismo cerebral intenso. No están comatosos pero sí en esa gama en la que perdieron la capacidad cognitiva y puede parecer irreversible.

—¿Cómo se puede diferenciar un coma del EMC?

—Lo debe hacer un neurólogo con experiencia. Pero quien pase mucho tiempo con el paciente debería prestar atención a las reacciones, porque quizá sean algo más que simples reflejos. No quiero dar falsas esperanzas, pero digamos que existe esta categoría que antes no era reconocible. Estos pacientes respiran por su cuenta y no tienen muerte cerebral.