POLITICA
PASO

Tuvieron protagonismo nacional y hoy van con candidaturas de perfil bajo

Fueron altos funcionarios y sus aspiraciones en la política cayeron de cara a las próximas elecciones.

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Anìbal Fernández, Javier Iguacel, Guillermo Montenegro, Alfredo Olmedo, Julio De Vido y Daniel Lipovetsky. | cedoc

Faltan 12 días para las elecciones primarias, abiertas, simultáneas y obligatorias (PASO) y las alianzas políticas ya determinaron quiénes serán los candidatos que buscarán un cargo. En ese marco, se destacaron seis funcionarios o exfuncionarios que ocuparon importantes cargos y hoy, aunque siguen con aspiraciones electorales, perdieron terreno político.

Aníbal Fernández. Fue Jefe de Gabinete de Cristina Fernández de Kirchner en dos ocasiones, Secretario General de Presidencia durante la misma gestión y senador de la Nación por la provincia de Buenos Aires. Antes había sido ministro de Producción en el mandato de Eduardo Duhalde, de Interior con Néstor Kirchner y hasta de Justicia, Seguridad y Derechos Humanos con CFK. 

A pesar de su largo currículum, su derrota en 2015 como candidato a gobernador frente a María Eugenia Vidal lo alejó temporalmente del kirchnerismo. Pero recobró protagonismo y anunció su candidatura a concejal en Pinamar. Fernández tiene una residencia en Cariló y pasa allí todos sus veranos.   

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Enfático defensor del modelo kirchnerista y de Cristina, aún en momentos en los que estaba alejado, Aníbal F fue siempre bien considerado por la militancia. Sin embargo, sus declaraciones sobre Vidal y Barreda afectaron un poco la apreciación que ese sector tiene sobre él. "Se equivocó", dijeron en privado en La Cámpora.

En público también fue cuestionado. Pero el ex jefe de Gabinete no tiene pensado bajar el perfil mediático. Aunque piensa seguir su carrera política en la costa bonaerense. 

Aníbal Fernández dijo que le dejaría su hijos a Barreda antes que a Vidal y lo repudiaron

Javier Iguacel. Se hizo conocido cuando asumió al frente del Ministerio de Energía que dejó Juan José Aranguren en 2018. Tiempo después, su cartera se ajustaría para transformarse en una Secretaría. Su paso en esa área duró menos de siete meses, aunque alcanzó para dejarlo muy debilitado. Fue una de las caras del tarifazo en un contexto de crisis y recesión. Uno de los aumentos que anunció terminó siendo "congelado" por el propio Macri: fue cuando dijo que los usuarios tendrían que compensar la devaluación a las empresas.

Luego de ese incremento presentó su renuncia, principalmente por diferencias con el ministro de Hacienda Nicolás Dujovne

Antes de su protagonismo nacional, fue candidato a intendente del municipio bonaerense de Capitán Sarmiento, aunque perdió con su rival del Frente para la Victoria, Oscar Ostoich, reelecto en 2015 por quinta vez. A pesar de la derrota, el gobierno lo nombró director de Vialidad Nacional, organismo dependiente del Ministerio de Transporte que conduce Guillermo Dietrich. Al frente de Vialidad hizo un informe sobre la obra pública durante el kirchnerismo, focalizado en Lázaro Báez. 

Pero eyectado del gabinete nacional, Iguacel volvió a candidatearse a intendente de Capitán Sarmiento, localidad en la que reside.  

La trama secreta de la salida del Gobierno de Javier Iguacel

Guillermo Montenegro. Ex juez federal de la Nación entre 2004 y 2007 que luego renunció a su cargo para ser ministro de Justicia y Seguridad del gobierno de la Ciudad de Buenos Aires con la asunción de Mauricio Macri. En 2015, cuando asumió Cambiemos, fue nombrado embajador de Argentina en Uruguay hasta 2017, año en que ganó su banca, con mandato hasta 2021, siempre en el oficialismo. 

Sin embargo, Montenegro ahora decidió ser precandidato a intendente de Mar del Plata, cargo que actualmente está en manos de otro oficialista, Carlos Arroyo, quien fue muy crítico con la gobernadora Vidal por no llamarlo "en dos años". El candidato de Vidal, de hecho, es Montenegro. La relación de Vidal con el actual intendente se rompió hace tiempo.

Alfredo Olmedo. El salteño fue primero senador provincial en 2007 y luego diputado nacional desde 2011 hasta la actualidad, alineado con el PRO desde su provincia. A lo largo de su gestión en la política en donde siempre tuvo discursos religiosos y muy cerrados que llamaron la atención de la sociedad, cuando se vio decepcionado por muchas medidas de Cambiemos como el visto bueno para debatir el aborto, decidió que sería precandidato a Presidente. No obstante, sus intenciones duraron poco y hoy no se sabe si se postulará a gobernador salteño, aunque manifestó sus ganas. 

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Julio De Vido. Hombre de confianza de Néstor Kirchner, se hizo conocido no sólo por ser el ministro de Planificación durante los 12 años de kirchnerismo sino por las causas de corrupción que hoy lo tienen procesado, preso y desaforado como diputado nacional por la provincia de Buenos Aires, cargo que tenía vigencia hasta diciembre de este año. Y va por la revancha: De Vido se postula al mismo cargo con el polémico y cuestionado exconductor de TV Santiago Cúneo.  

Hace pocos días, difundió desde su cuenta de Twitter un insólito pedido a la militancia kirchnerista, a la que apela para la elección: solicitó que corten a Sergio Massa y lo pongan la boleta. Pero lo hizo apelando al cantito que hasta hace un año se escuchaba en La Cámpora, tildando de traidor al ex intendente de Tigre. 

Daniel Lipovetzky. Quedó afuera de los elegidos por el oficialismo para renovar su banca en la Cámara de Diputados de la Nación y desde su espacio aclararon que su ausencia en las listas nacionales no tuvo que ver con el proyecto para la legalización del aborto que fue impulsado por él. Lipovetzky irá como candidato a legislador provincial y hace campaña con María Eugenia Vidal.

J.D. / MC