MODO FONTEVECCHIA
Dictadura

José D’Angelo: "No estoy en contra de las indemnizaciones a las víctimas de la dictadura"

El autor del libro "La estafa con los desaparecidos" brindó detalles de su investigación en Modo Fontevecchia. "Durante muchos años intenté investigar con qué dinero se habían pagado las indemnizaciones y me encontré con un muro absolutamente infranqueable", declaró.

José D' Angelo
José D' Angelo | NA

El ex militar Jose D’Angelo narró distintos casos que fundamentan su investigación en el libro “La estafa con los desaparecidos”. “La verdad histórica es que no hay entre los argentinos ningún sector libre de culpa”, señaló en Modo Fontevecchia, por Net TV, Radio Perfil (AM 1190) y Radio Amadeus (FM 91.1).

Jose D’Angelo es periodista y ex militar. En 1987 y 1988, participó en los episodios protagonizados por los denominados Carapintadas. En 1989, encuadrado en la Compañía de Comandos 601, intervino en la recuperación de los cuarteles de La Tablada tras el ataque guerrillero del movimiento “Todos por la Patria”. Además es autor del polémico libro “La estafa con los desaparecidos”. 

Ayer entrevistamos en este programa a Luis Labraña, quien decía que el número de 30.000 desaparecidos tenía como objetivo una estafa económica para que los otros 22.000, entre el número oficial de 8.000 de desaparecidos generara 22 mil subsidios a personas que eran inexistentes o no habían sido víctimas de la dictadura. Además, citaba un fragmento de tu libro “La estafa de los desaparecidos”, ¿coincide con que la cifra es para generar 22 mil subsidios para personas que no fueron víctimas?

Esto no les gusta a los autoritarios
El ejercicio del periodismo profesional y crítico es un pilar fundamental de la democracia. Por eso molesta a quienes creen ser los dueños de la verdad.
Hoy más que nunca Suscribite

Estoy muy orgulloso de haber vestido el uniforme del Ejército Argentino, mi único antecedente militar en mi familia es que mi mamá era descendiente directa del General fue jefe del regimiento de Granaderos a Caballo en el cruce de los Andes.

Yo fui militar hace 30 años, fui pasado a retiro obligatorio por aquellas sublevaciones a las que usted hizo referencia. El libro no se llama “La estafa de los desaparecidos”, se llama “La estafa con los desaparecidos”, además, el nombre de “estafa” lo puse yo porque esa es la carátula que le puso el doctor Lijo a la denuncia que presenté, que está actualmente tramitándose en el juzgado, en donde denuncio una enorme cantidad de irregularidades de nombres, documentos y casos fraguados que sirvieron para cobrar multimillonaria cifras en un tema que me parece central y que debía tener una transparencia absoluta.

Cualquiera sea la administración que maneje estos temas debería tener una transparencia absoluta y no debería haber nada oculto, sin embargo, no fue así. Durante muchos años intente investigar con qué dinero se habían pagado las indemnizaciones y me encontré con un muro absolutamente infranqueable para obtener esa información. Gracias a mi trabajo periodístico pude obtener mucha información y finalmente el doctor Lijo le ordenó a la Secretaría de Derechos Humanos que me empiece a brindar información. 

Yo escribí dos libros, el primero se llama “Mentirás tus muertos”, cuyo prólogo lo hace Luis Labraña y el segundo se llama “La estafa con los desaparecidos”, que está basado en esta denuncia de la que estábamos hablando.

Luis Labraña: "Alguien cobró por los 22 mil desaparecidos que faltaban sólo para justificar el vacío de la caja"

¿Usted pudo averiguar cuántos casos hay de personas que no deberían haber cobrado ningún subsidio?

No tengo información de eso. El Estado no brinda esa información, es imposible acceder. 

Hay un caso que explica mi investigación. La Federación Anarquista Uruguaya es una organización que utilizaba la violencia armada en los 70’ en el Uruguay que se traslada a la Argentina, y dos personas pertenecientes a esta organización armada uruguaya secuestran a un hombre, los detienen, afirman ser delincuentes comunes, los procesan, los condenan y muchos años después se presentan ante la Secretaría de Derechos Humanos y piden cobrar la indemnización por haber sido presos políticos. Efectivamente, le pagan la indemnización y hoy está actualizada a 180 millones de pesos cada uno. 

Usted, como militar, debe saber que cualquier organización tiene un porcentaje de defecto, que pasa a ser patológico cuando es inaceptable. No sé cuántos subsidios se pagan, vamos a suponer 10 mil, si encontramos 200 anomalías es una cosa, pero si encontramos 2 mil, es otra. Para poder suponer que es un tema que está pensado con ese fin y que no es un defecto de mala praxis, la cuestión de los números importa…

Antes de entrar al ejército yo jugaba al rugby. Mi primer entrenador es una persona que está desaparecida, me honra la amistad de su hermano y de su madre, que cobró la indemnización por Pablo, y no tengo nada en contra de esa indemnización, no estoy en contra de las indemnizaciones a las víctimas de la dictadura, yo estoy denunciando la estafa con los desaparecidos. 

Otro caso es el de dos hermanos, Pedro y Carlos Sabao, que tenían un kiosco de bebidas muy humilde a orillas del Río Paraná en Rosario. En noviembre del 75’, se acercan unos vehículos, se paran frente al kiosco, se bajan y sin mediar palabra le abren el fuego a los dos hermanos. Carlos cae gravemente herido al piso. Pedro corre hasta el Río Paraná, intenta escapar nadando, lo persiguen y lo balean. Al día siguiente, los diarios titulan “extremistas ultiman en Rosario a un militante de la CGT”, y cuentan que fue extraído del Río Paraná el cadáver de Pedro Sabao y que su hermano Carlos se repone de las graves heridas.

A la semana, la revista Evita Montonera, en una sección que se llamaba “crónica de la resistencia”, en noviembre del 75’ también, dice que “un pelotón de combate de montoneros ejecutó al traidor y delator de compañeros y actual miembro de la Juventud Sindical de Rosario, Pedro Sabao, quien, al intentar huir, cayó al Río Paraná”. Estos son los hechos históricos, según mi investigación, en el año 2006, en el Gobierno De Néstor Kirchner, incorporan a Sabao como una víctima de la represión ilegal del Estado, este homenajeado en el Parque de la Memoria como un desaparecido por el Estado y por su muerte, actualizado a ahora, el Estado pagó una indemnización de 60 millones de pesos. Esto es la conclusión del relato: Sabao fue muerto por montoneros, lo reconocen los propios montoneros, sin embargo, fue supuesto como una víctima del Estado y se le paga una indemnización.

No termina acá, porque en el año 2015, Cristina Kirchner presenta un nuevo informe, distinto de el del 2006, en donde ya Sabao no figura más, esto quiere decir que lo colocaron como una víctima, le pagaron la indemnización y luego lo sacaron de la lista. Si usted va al Parque de la Memoria, va a encontrar la placa de Sabao Pedro Alberto, y arriba va a encontrar la placa de Sabao Carlos. Cuando yo la vi, volví a mi casa, busqué la guía telefónica de Rosario y llamé a Carlos, me atendió el hijo y me dijo que su padre había muerto en un geriátrico. Entonces no sé cuántos casos hay, deben abrir los archivos del CONADEP y conocer cómo han sido pagados. El caso de mi entrenador de rugby ha sido bien pagado, porque es una persona que está desaparecida por el Estado.

Los mensajes de Javier Milei y Victoria Villarruel por el 24 de marzo 

Entiendo perfectamente, buscaremos la forma de conseguir esa información oficial. Entiendo claramente el diferencial que usted tiene con lo que planteó Luis Labraña, que aseguraba que la diferencia entre los 30 mil y los 8 mil eran personas que habían cobrado de manera ilegal.

La ley 24.411 dice en el artículo quinto que si el desaparecido reaparece no tendrá la obligación de devolver lo pagado, el problema con esto es que en el año 1984 la CONADEP tiene un listado de 8961 personas, en el año 2006, el gobierno de Néstor Kirchner, presenta un listado que tiene 2541 nombres menos que aquel listado primero. Este capítulo se llama “Los aparecidos”, que es el primer capítulo del libro. Esto quiere decir que hay 2541 personas que figuran como desaparecidas en el 84’ pero que ya no estaban en el informe del año 2006, que pueden haber cobrado la indemnización y no tienen obligación de devolverla. 

¿El subsidio es por haber sido víctima o por haber sido muerto? Hay centenas de casos de personas que estuvieron desaparecidas ilegalmente y después aparecieron…

Hay dos leyes, la 24.411 para desaparecidos y muertos y la 24.043 para los que estuvieron detenidos. 

¿Detenidos desaparecidos?

La Ley 24.411 habla de las personas que están desaparecidas.

¿Las personas que cobraron y luego los liberaron, tienen derecho a cobrar? El hecho de que no los hayan matado no quita que no hayan sido víctimas sí estuvieron detenidos ilegalmente…

Si fueron detenidos ilegalmente sí, pero si estuvieron detenidos legalmente no, como en el caso de los uruguayos.  

Minuto a minuto: cómo fue el golpe del 24 de marzo de 1976 

Ahí no cabe ninguna duda, el punto es poder separar la paja del trigo y, como usted dice, es “con los desaparecidos” y no “de los desaparecidos”. Por lo que entiendo usted no coincide con aquella frase del “curro de los derechos humanos”...

No. Yo creo, como los jefes montoneros en el año 89’, cuando firmaron un acta frente a La Virgen de Luján, que decía que la historia argentina de las últimas décadas tuvo una guerra civil intermitente y que la verdad histórica es que no hay entre los argentinos ningún sector libre de culpa y de error por los enfrentamientos, y que la pacificación y la reconciliación de los argentinos es el camino que debemos vivir. 

VF FM