OPINIóN
Columna de la USAL

Bastaron 6 meses para desordenar más de 204 años

De esta crisis, saldrá un nuevo orden mundial, que podrá ser más humanista o más robótico y seguro dependerá de nosotros.

Coronavirus en Argentina.
Coronavirus en Argentina. | CEDOC

De esta crisis, saldrá un nuevo orden mundial, que podrá ser más humanista o más robótico y seguro dependerá de nosotros. Viviremos una nueva realidad, porque llamarla normalidad, sería subestimar estos tiempos. Ante una situación nunca jamás pensada donde hay que mantener el aislamiento sin certezas de cuando finalizará, es esencial instrumentar herramientas para sostener la cotidianidad.

La capacidad del psiquismo para organizarse y la disposición de recursos es vital para poder actuar ante lo inesperado.

Quizás vivir en la incertidumbre, será nuestra nueva realidad, pero lo cierto, que hoy pesa más el cansancio, lo incierto, lo inestable, que toda la energía que pongamos para cuidarnos, y a este escenario es al que no tenemos que llegar, al desánimo, al que no me importa y a la angustia de no ver futuro inmediato, hay que darle una respuesta de salida.

Esto no les gusta a los autoritarios
El ejercicio del periodismo profesional y crítico es un pilar fundamental de la democracia. Por eso molesta a quienes creen ser los dueños de la verdad.
Hoy más que nunca Suscribite

Es la primera pandemia en la era de la información, con lo cual, la velocidad que nos llegan las noticias, se derraman y nos acechan sin mediar lo consiente, que también a este aquí y ahora, deberemos cuidar.

Vida social y pandemia

Estamos siendo el experimento del trabajo a distancia, de mayor envergadura de la historia, estamos proponiendo un mundo sin contacto, para salvarnos, esto es esperable de los robots, pero no de los humanos, quizás el mayor impacto sea que el coronavirus, vino a atacar a nuestra esencia humana , que es la del abrazo, el lazo, el vínculo, la piel como sostén de esa estructura anímica, que lo hace sujeto, sin ese contacto un bebé puede morir, el niño se enoja, nuestros jóvenes se deprimen, los ancianos se disocian y los adultos nos violentamos. Estamos venciendo las leyes de la humanidad. Por eso urge trabajar en ello, es prioridad hoy hablar de los impactos y de las grandes amenazas a la salud mental de la población, que serán tan fuertes, como el miedo a los contagios

Deberemos repensar nuestro estilo de vida que llevábamos y el que llevaremos después de la pandemia, el lugar que le dábamos a cada cosa en nuestras vidas, de espacio y tiempo, ¿será el mismo al volver?

No nos imaginamos que fuera posible que nos confináramos todos y sin embargo lo hicimos, el mundo en cierta medida, para algunos, estaba preparado, las herramientas estaban, era el hombre que solo lo había pensado en las películas como posible, muchos hoy lo estamos haciendo, casi o más que en nuestra antigua realidad, para ser coherentes a los términos planteados, otros se  quedan al margen y de esto también clama sentencia el que nos dediquemos, quizás sea el momento de reflexionar sobre esto, cuanto de nuestro tiempo puede ser remoto y cuanto presencial físico, cuanta desigualdad en todos los órdenes tiene el mundo

Igualdad y desarrollo, los desafíos de la pospandemia

Toda crisis disruptiva, trae cambios grandes, algunos ya se estaban gestando y ahora se aceleraron y otros pasaran a ser parte de nuestra vida, sin haberlo elegido.

El futuro se juega en dos dilemas: 1) el capitalismo continuará con más fuerza, como dice el filósofo coreano Byung-Chul Han. 2) el sistema recibió un golpe fatal y lo que viene es una nueva era de comunismo colaborativo, como dice el filósofo Esloveno Slavoj Zizek, o sea el ultra capitalismo no caerá por un virus, sino por una revolución humana y la solidaridad colectiva no es un idealismo, sino lo único que puede salvarnos, lograr pensar en estos sentidos, no como antagónicos , sino como posibles, puede ser la clave, para amortiguar los sufrimientos de la post pandemia.

El psiquismo fluctúa entre dos profundidades la debilidad y la fortaleza.

Para todo vamos a necesitar muchas dosis de paciencia, para extraer todo lo reservados que tenemos, seguro vamos a pasar por lugares pendientes, deseos postergados, promesas incumplidas, pero seguro en este buceo que hoy nos permite esta pandemia, nos hará más fructífera la salida, seguro que encontraremos la caja de herramientas perdidas, que ahora será recurso para implementar este nuevo sujeto que emergerá.

Lo real, que la vida, un virus, nos puso de sopapo en la tierra y nos dio tiempo para volver a los almuerzos familiares, o a las comidas en casa a solas, nos dio tiempo de no viajar, de no salir, de re inventar el estar, pero impera la diferencia si veo o miro, si escucho u oigo, para poder habitar este nuevo mundo.

 

 

 

*Decana de la facultad de psicología y psicopedagogía USAL.