Alejado de la Cámara de Diputados, Facundo Moyano también toma distancia del Frente de Todos tras dejar su banca. Quedó molestó tras el cierre de listas donde apuntaba a “tener más espacios”. También renegó en varias ocasiones porque a sus proyectos de ley, como la creación de una empresa estatal para que regule la concesión de los peajes y alcohol cero, no tuvieron ruedo parlamentario.
Pero claro, la primera de estas iniciativas también tuvo el rechazo del Sindicato Trabajadores Viales y Afines de la República Argentina (STVyARA), que conduce Graciela Aleñá. Esta organización está alineada con el Frente Sindical para el Modelo Nacional, el espacio gremial que lidera Pablo Moyano, enfrentado --ambos bajo el ala del padre Hugo-- con Facundo.
“Una nueva Sociedad Anónima no hará más que superponer funciones con Vialidad Nacional”, sentenció Aleñá para rechazar el proyecto del hijo de Camioneros. “Vialidad Nacional ya es estatal y cuenta con 89 años de trayectoria como órgano rector de la red troncal de caminos nacionales, más allá de las concesiones”, agregó. Además, en el Gobierno rechazaron esta iniciativa, que toca un tema sensible.
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A una semana de su renuncia, en estos días trabaja en la candidatura de María Florencia Cañabate para que lidere el Sindicato Único de Trabajadores de los Peajes y Afines (Sutpa). Si bien no descarta retomar cargos en la actividad gremial, desde la organización que nuclea a estos trabajadores señalaron a PERFIL que "es muy complicado volver a peajes, cuando se fue él mismo sabía que era un sindicato con fecha de defunción y la pandemia es otra estocada más a la presencialidad en un peaje".
El malestar de Facundo Moyano con el Frente de Todos no es de las últimas semanas. En conversaciones privadas, antes de renunciar, solía repetir que estaba “aburrido”. Además, según pudo saber PERFIL, el gremialista estaba convencido que en la Cámara baja “no se puede hacer nada, no hay estructuras de poder, ni de gestión”.
Así, terminó mal su vínculo con el ala kirchnerista y con el massismo en Diputados. Los primeros no intentaron frenarlo cuando anunció que iba a irse de la Cámara. Incluso, Hugo Yasky contó que dos días antes de anunciarlo se fue del grupo de WhatsApp del bloque oficialista y no hicieron mucho por retenerlo.
“Nadie se desesperó ni le prestó mucha atención. Los pibes chochos porque entra uno de ellos. Así que imaginate que mucho no lo retuvieron”, contó una fuente parlamentaria a este medio. Se refiere al hombre de Chivilcoy Lucio Yapor ,un militante de La Cámpora, que responde orgánicamente a Máximo Kirchner.
Con Sergio Massa costó recomponer el vínculo tras la ruptura de Moyano en 2018 con el Frente Renovador, aquél éxodo que comandó el hoy canciller, Felipe Solá, en búsqueda de la unidad. Moyano, quién tiene mandato hasta 2023, ya que aun la Cámara no aceptó su renuncia, apostaba a tener mayor presencia en este nuevo ciclo. En parte la tuvo cuando el tigrense trabajó a la par de él y otros legisladores de estirpe germinal en la reforma del Impuesto a las Ganancias. Pero no mucho más.
"Los pibes de La Cámpora chochos que Facundo se iba porque entra uno de ellos"
El proyecto que presentó con más énfasis en el último tiempo fue el de Alcohol Cero. “Es de vital importancia que este año se retome la agenda y se discuta con urgencia el alcohol cero para conductores. Los siniestros viales son la principal causa de muerte en jóvenes de menos de 35 años, y causan al menos 7.000 muertes al año”, dijo al anunciarlo.
Sin embargo, ninguna de las espadas parlamentarias del Frente de Todos recogió el guante y trabajó para llevarlo al recinto. Debió conformarse con que Massa lo incluyera en la presentación que hizo junto con el entonces ministro de Transporte Mario Meoni del proyecto que propone crear la figura de "homicidio vial", con penas de 8 a 25 años para quienes maten corriendo picadas.
No se puede discutir futuro del trabajo, ni democratización sindical, ni perspectiva de género en los sindicatos, sin nosotras. Las mujeres somos parte de la fuerza laboral, de la creación de riqueza y de la producción. #EsConNosotrashttps://t.co/PauEPSE596
Con el Gobierno nacional el vínculo tampoco fue lo que esperaba. En línea con la búsqueda del clan Moyano, el hijo del líder de Camioneros apuntaba a la secretaría de Deportes. Sin conseguir el objetivo trabajó en la comisión de Deportes, que tampoco logró liderar y quedó a cargo del ex árbitro de fútbol, hoy diputado del PRO por Córdoba, Héctor Baldassi.
Semanas antes de romper, tuvo un cruce vía Twitter con la secretaria de Legal y Técnica, Vilma Ibarra. “Hay innumerables errores y políticas equivocadas, fuera del sindicalismo, que se llevan adelante desde el Ejecutivo que cuando quieren las debatimos en público o en privado. Un abrazo compañera”, contestó el diputado. Antes, la funcionaria había criticado un posteo en el que Moyano mostraba una reunión de varones hablando de sindicalismo y perspectiva de género. “Las mujeres somos parte de la fuerza laboral, de la creación de riqueza y de la producción. #EsConNosotras”, señaló la funcionaria
“Hay innumerables errores y políticas equivocadas, fuera del sindicalismo, que se llevan adelante desde el Ejecutivo", Facundo Moyano
“No podemos conformarnos con un país que tiene un índice de pobreza de más del 40% y una informalidad laboral del 50%, frente a un mercado que no genera empleo formal hace más de diez años”, disparó en un claro mensaje a la Casa Rosada al anunciar su renuncia a la banca de Diputados. “No puede haber justicia social si hay argentinos sin trabajo o argentinos con trabajo y sin derechos”, remarcó.
En este escenario, el joven gremialista buscará enfocarse más en el Club Atlético Alvarado de Mar del Plata, donde ocupa la vicepresidencia (a pesar de ser hincha de River Plate). En paralelo, tratará de abrirle la puerta a nuevos dirigentes en el Sutpa, aunque la suya parece estar cada día más cerrada.
