Una de las grandes complejidades al momento de enseñar arquitectura es la de explicar a los alumnos las características de un determinado edificio o espacio y que el alumno pueda captarlas y sentirlas.
Si bien a lo largo de los años se ha utilizado material gráfico en dos dimensiones (planos y fotografías) para ejemplificar los conceptos que se quieren explicar, ¿no sería acaso más fácil si el alumno pudiese experimentar el espacio de un edificio que se encuentra no solo lejano geográficamente sino también cronológicamente?
Y si además consideramos el momento especial en el que el mundo se encuentra sumergido y la necesidad de mantener la distancia social y el traslado de personas, las herramientas sociales se convierten en un socio fundamental para la educación.
Cómo será el futuro de la arquitectura
Con la premisa de aprender a partir de la experimentación y con el fin de atraer el interés de las nuevas generaciones de alumnos, en 2017 se introdujo en las cátedras de Historia de la Arquitectura de la Facultad de Arquitectura y Urbanismo de la Universidad de Belgrano la experiencia virtual a partir del uso de lentes conocidos como VR goggles.
Esta novedad permitió que los alumnos pudiesen vivir y sentir el espacio de construcciones de la antigüedad y el mundo medieval, sin necesidad de trasladarse hasta el sitio en donde se encuentran.
La experimentación a partir de imágenesVR360° de alta calidad resultó ser un recurso invaluable tanto en el aula como también en el hogar, especialmente en este momento de pandemia, puesto que los alumnos pueden acceder a dicho material a través de diferentes páginas web que permite una mayor comprensión en comparación con una fotografía estática tradicional.
La arquitectura y el bien común
Esto permitió que, en el contexto de pandemia en el que se realizan las clases a distancia, los alumnos puedan seguir experimentando los espacios arquitectónicos que forman parte del programa de la materia pero, asimismo, incentivados por estos nuevos recursos, investigar edificios contemporáneos de intereses para el resto de las materias.
Dentro de los recursos virtuales, el que se puso en práctica es el de fotografías VR 360°, es decir la captura de un espacio a partir de cámaras específicas, o incluso de una manera más básica con un celular.
A diferencia de las fotos panorámicas de 180° o 360° en las que se trabaja sobre un solo eje, en la fotografía VR 360°se cubre todo el espectro visual, incluyendo el piso y el techo o cielo, pudiendo visualizar un espacio de la misma manera que se podría hacer de forma presencial.
La historia de la silla como reflejo de la cultura
La experiencia es más que satisfactoria tanto para alumnos como docentes. Experimentar el espacio de manera virtual a través de fotografía VR360°permite apreciar detalles arquitectónicos, entender el concepto de escala y proporciones de los edificios, sentir el efecto que un espacio genera en las personas y que, como futuros arquitectos, los alumnos deben poder comprender para proyectar en consecuencia.
Diseño y arquitectura social: transformamos la realidad o somos indiferentes
Pero, fundamentalmente, permite acercar una realidad arquitectónica, muchas veces lejana geográfica y económicamente, en la practicidad del taller universitario, logrando la motivación de los alumnos y, en definitiva, contribuyendo a los pilares de inclusión, equitatividad y calidad que la Organización de las Naciones Unidas propone para la educación.
* Fernando Couturier, profesor de la Facultad de Arquitectura y Urbanismo de la Universidad de Belgrano e investigador en el Grupo de Patrimonio Arquitectónico.
