“Sos la persona indicada para el momento que se viene”, le dijo Hugo Moyano a Daniel Scioli en un almuerzo que compartieron el viernes. El líder sindical le ofreció su apoyo así como lo empiezan a mostrar otros dirigentes que hacen que la pantalla del celular del embajador en Brasil se ilumine a cada rato. Pero también recibió esta semana al gobernador Ricardo Quintela, quien fue a decirle que los jefes provinciales quieren una lista única. “La unidad está garantizada conmigo en la cancha después de las PASO”, le respondió.
En una reunión que no duró más de media hora, el embajador de Brasil le explicó al jefe provincial de La Rioja que “el mejor orden político y económico que podemos tener es una PASO integradora y amplia que dé perspectiva de triunfo”. También le marcó una contradicción: muchos de los jefes provinciales que pidieron candidato único en sus provincias aceptaron las internas. Quintena no llegó a pronunciar la posibilidad de que Scioli se baje y le avisó que iría a ver a Alberto Fernández y a Cristina Kirchner para dialogar sobre la necesidad de que haya un sólo postulante a la presidencia.
El almuerzo con Hugo Moyano fue mucho más largo. Daniel Scioli logró que el sindicalista coincidiera con su hijo Pablo, con quien viene manteniendo diferencias: ambos apoyaron en la misma semana al exgobernador. Pero Hugo llegó el viernes con otros dos hijos, Huguito y Jerónimo. Allí Scioli ratificó que seguirá adelante, algo que Hugo celebró.
Daniel Scioli sabe que hasta el 24 de junio las presiones seguirán. Pero no se mostró asombrado de que la reunión de intendentes de la primera y tercera sección electoral bonaerense no haya dejado una réplica del documento de los gobernadores. Varios alcaldes hablan con Scioli y le dicen que lo que no quieren es “lío en sus distritos”. Y si hay dos listas, pretenden ir colgados de las dos. Los jefes distritales llegaron a La Plata sabiendo que querían su firma en la proclamación de un candidato único. Pero el gobernador bonaerense, Axel Kicillof, no llegó a plantearlo. La discusión se extendió en los montos de las obras. Fueron a pedir mucho más de lo que se llevaron.
Mientras tanto, la firma de avales para poder presentar las candidaturas continúan. La más activa en la tarea es la ministra de Desarrollo Social, Victoria Tolosa Paz. Ya consiguió 56 mil firmas, el doble de lo que se necesitan. De todos modos, a 14 días de la presentación de las listas, el armado de fichas continúa. Las juntas electorales pueden buscar alguna excusa para dejar alguna candidatura afuera y se preparan para eso. “Estamos recibiendo una avalancha de avales”, dijo la funcionaria.
También se avanza en la discusión del reparto de listas. Tal como anticipó PERFIL, Máximo Kirchner planteó en un principio que pondría un 40% de piso para poder discutir lugares en las listas de la elección general. El número ya bajó.
Las declaraciones de Massa de este sábado y la exigencia de los gobernadores peronistas no generarán ningún retroceso en las aspiraciones de los candidatos que hasta ahora quieren competir. Al igual que Scioli, el ministro del Interior, Eduardo “Wado” De Pedro, y el jefe de Gabinete, Agustín Rossi, siguieron con la agenda de campaña programadas. Lo mismo hizo Juan Grabois. Pero todos esperan el movimiento de Cristina Kirchner. Nadie sabe hacia dónde puede ir.