Todo parecía encaminado para un acuerdo, en línea con lo que se está negociando en Diputados. Sin embargo, la propuesta que la vicepresidenta, Cristina Kirchner, le presentó el martes a la oposición para avanzar con sesiones virtuales en el Senado fue rechazada y ahora la negociación se trabó una vez más. Esta tarde, el interbloque de Juntos por el Cambio le envió una carta en la que plantean sus reparos y ahora falta la respuesta de la titular de la Cámara alta.
El texto, sin embargo, muestra una cordialidad que no fue la que transmitían los senadores opositores una vez conocida la propuesta. “Es un claro intento de avasallamiento del Senado por parte de CFK”, planteaba un radical pocas horas después de conocido su protocolo. “Así como lo mandó no nos parece, vamos a hacer una propuesta de mejora”, razonaba un senador del PRO. La carta “conciliadora”, en parte, se explicaba por la necesidad de evitar quedar en una postura de entorpecimiento del funcionamiento del Senado. Es que oficialistas y opositores se vienen acusando mutuamente en las últimas semanas de ser los responsables de que todavía no hayan podido ponerse de acuerdo en cómo sesionar. “En este sentido, desde nuestros interbloques consideramos imprescindible alcanzar un acuerdo político que viabilice el funcionamiento del Senado en el referido contexto de pandemia”, aclaran los senadores opositores en una misiva que firman Luis Naidenoff (UCR), Humberto Schiavoni (PRO) y Juan Carlos Romero (Federal).
Cristina Kirchner: "Cuando la Corte Suprema quiere resolver un asunto, lo hace"
Todavía sin haber recibido las contrapropuestas, en el entorno de Cristina ya anticipaban que las veían como “chicanas para no sesionar”. “Ella quiere trabajar, sesionar ya y considera que la mejor forma es avanzar con este protocolo”, resumían. Desde que salió el fallo de la Corte Suprema que rechazó su planteo de declaración de certeza, la vicepresidenta se mostró decidida a avanzar en sesiones virtuales.
Cómo es la sesión virtual que planea Cristina Kirchner para la próxima semana
Los puntos a los que apunta la oposición son principalmente tres. Primero que se permita que sean sesiones mixtas, con presencia de representantes de cada bloque en el recinto, tal como se prevé que hará Diputados. La propuesta de Cristina era que ella estaría sola en el recinto y el resto de los senadores en las legislaturas de sus provincias o algún otro organismo público. “Eso generaría la ridiculez, por ejemplo, que (Martín) Lousteau, (Guadalupe) Tagliaferri y (Mariano) Recalde tengan que ir a la Legislatura porteña para participar de una videoconferencia”, analizaban temprano en el bloque radical. En la nota que presentó la oposición proponen que se ponga un límite de hasta 15 senadores, respetando la proporcionalidad política. Y también que puedan estar desde sus despachos, por ejemplo.
Otro punto en el que hacen hincapié es en que quede claro en que el sistema virtual a aplicar es “excepcional”, para aplicar en el marco de la pandemia, y solo para leyes vinculadas a la problemática. Proponen un plazo de 60 días prorrogables, “previo acuerdo político de los bloques parlamentarios”.
Por otra parte, también pusieron reparos a la dinámica que propone Cristina para las sesiones virtuales, donde apuestan a que la cantidad de oradores y los tiempos de los discursos se mantengan como es en la actualidad. La vicepresidenta propuso que la lista de oradores sea cerrada y los discursos se limiten a 5 minutos.
MC